Realmente espectacular y completamente blanquinegro, de principio a fin, pudimos disfrutar de un derby con mayúsculas entre el Real Murcia y el F.C. Cartagena que demostraron en las gradas y en el campo que el fútbol en esta Región se vive con pasión y deportividad. Todo estuvo marcado por el min.2. 0-1, De Lucas asistido por Lafuente sonrojaba a las gradas que le vieron jugar durante 2 años: la defensa y Elia se empeñaron en regalar un gol de rebote. Acto seguido, en el min. 4, el magnifico capitán Mariano, asistía magistralmente al eterno Víctor para que anotase su gol 150 de su carrera. En el Murcia , Mejia, Sergio y Elia "ni están ni se les espera". El 0-2 era tan aplastante como el juego cartagenero, que certificaba con el 0-3 de Toche en el 25, asistido de nuevo por Lafuente, la enorme diferencia entre los dos rivales y sus respectivas posiciones en la tabla. En esta primera parte la ambición y el planteamiento inculcado desde la sabia psicología del técnico J. I. Martínez, elevaron a la máxima potencia el sentido exquisito y la organización con la posesión del balón desde atrás. Sobresaliente Cygan, ordenado y sin fallos, Longas, con su obsesión por generar fútbol de calidad, Lafuente, muy vertical y Víctor con Toche y De Lucas, con libertad de movimientos para asociarse con buenas diagonales. Fruto del orgullo herido murciano, en la segunda mitad con gol incluido de Isaac en el 61, fue el 1-3, el Cartagena se puso el mono de trabajo y se dedico a evitar los ataques peligrosos del Murcia. Apenas se aprecio opción a cambiar el sino del marcador, ni con la errónea roja a Mariano. El fútbol desarrollado estaba por encima, incluso del 1-4, de nuevo Víctor de penalti dudoso en el 82. El Efese, así, convoca a los más viejos del lugar para predecir si puede soñar con la primera división, si puede tocar el cielo… de La Condomina al Cielo.