Cientos de murcianos colapsaron ayer la autovía del Noroeste y las carreteras secundarias de las pedanías altas de las poblaciones de la zona, aunque el tráfico fue lento, pero fluido, según informó ayer el servicio de Coordinación de Emergencias. La mayoría de las calzadas ya estaban abiertas y muchos aprovecharon el domingo para disfrutar de la nieve abundante en cualquier rincón.

La MU-504, en Cehegín, continuaba al cierre de esta edición con nivel negro debido a la nieve, y la A-91, en Puerto Lumbreras, que ha estuvo cortada hasta ayer, se reabrió al tráfico con nivel amarillo de circulación lenta con paradas esporádicas. También con nivel rojo estuvo la MU-703, desde el kilómetro 24 al 3, en Moratalla. Además, cuatro carreteras de la Región presentan nivel amarillo porque se encuentran cubiertas por la nieve en ambos sentidos. Se trata de la C-3300, desde el kilómetro 78.5 al 108, en Caravaca; la MU-702, desde el kilómetro 14 al 35, a la altura de Moratalla.

En Cehegín el temporal de nieve comenzó ayer a remitir y la fina cortina de agua que cayó de manera ininterrumpida desde el sábado, hizo que la nieve desapareciera por completo.

A causa del mal tiempo se suspendió el Cehegín Cultural previsto para la noche del sábado, pues el mal estado de las carreteras imposibilitó el desplazamiento de una compañía murciana de danza. También el Mercadillo Artesanal 'El Mesoncico', se suspendió ayer, aunque algunos turistas visitaron la zona acompañados por un guía turístico.

En Lorca, el Servicio Municipal de Emergencias realizó durante el fin de semana un total de 32 servicios,.

En el casco urbano y pedanías cercanas, las fuertes lluvias obligaron a intervenir para achicar agua y retirar obstáculos de las carreteras. En la calle Cava diversas viviendas se vieron afectadas por filtraciones de agua a través del suelo y paredes. Vecinos de la pedanía de Doña Inés denuncian que han estado sin suministro eléctrico durante 24 horas, cuando en el resto de pedanías altas fue llegando a lo largo del sábado.

En Mazarrón, la rambla de las Moreras seguía tirando miles de litros de agua de la lluvia al mar. La carretera D-4 era rebasada por el agua, aunque se encuentra cortada al tráfico, porque aún no está terminado el puente sobre la Autopista Cartagena Vera. Los vecinos de Bahía fueron los más afectados en la llamada Venecia, pues las calles que se convirtieron ayer en auténticos canales de agua, dejando a algunos de los vecinos incomunicados. Los ríos de agua llegaban al mar y algún chiringuito vio sus sillas y mesas de la terraza nadando en el mar.