Usted es una de las personas que aparecen en todas las quinielas políticas cuando hay elecciones.

Agradezco sinceramente que se me tenga tan en cuenta. Todo lo que afecta a Murcia, a España y, en general, a Europa y al mundo me interesa y lo vivo con mucha intensidad. La vertebración de las autonomías y todo lo que ocurre a la Región me interesa.

¿Y la política?

Yo sigo la política desde siempre, desde que era muy pequeño, porque mi padre fue teniendo de alcalde del Ayuntamiento de Murcia y diputado provincial, además de pedáneo de Algezares. De hecho, hay un colegio que lleva su nombre, Francisco Cobacho. Yo sigo todo lo que afecta a Murcia, desde los problema del agua, el aeropuerto o el AVE. El otro día los periódicos se hacían eco de que estamos asistiendo a una despoblación del mundo rural, a la que se intenta hacer frente con políticas europeas. También he estudiado el Derecho agrario, de familia y de sucesiones, pero todo lo concerniente a la agricultura lo he seguido. De Murcia me preocupa todo.

¿Por qué no aceptó las ofertas que recibió para dar el salto a la política?

Agradezco mucho, de corazón, tanto al Partido Popular como al PSOE, que en su momento me ofrecieron distintos cargos. Lo que pasa es que no eran momentos adecuados para mí. Si con esa encomienda, que acepto en los últimos años de mi vida profesional, con 64 años, puedo contribuir a que la Región mejore, lo haré con gusto.

Pero, ¿se planteó aceptar?

Churchill decía que la democracia es el mejor de los sistemas. No hay duda de que la democracia necesita personas que gestionen bien Murcia y España. Sí me he planteado la política, pero dejé el cargo de rector después de estar 25 años seguidos en la gestión universitaria, porque entré como secretario general con 30 años y, después de ser decano y rector, terminé saturado. Mi segundo mandato de rector entre 2010 y 2014 no se lo deseo a nadie, porque no teníamos dinero prácticamente para pagar las nóminas. La Comunidad también tenía graves problemas. Las circunstancias hicieron que saliera un poco saturad0, porque me pilló toda la crisis. Había quien preconizaba un despido masivo de personal de Administración y Servicios y de interinos, pero yo me negué. Un ERE no iba a hacer.

¿Qué puestos le ofrecieron los populares y los socialistas?

El PSOE me propuso ir de cabeza de lista a la alcaldía de Murcia, pero también el PP me ofreció en su momento incorporarme con un número muy alto a la lista de la Asamblea Regional. Además, he tenido oportunidad de entrar en el Gobierno regional, pero esto no es algo que no se sepa. Aunque agradezco mucho la confianza que ambos partidos han depositado en mí, he aceptado esto porque creo que es lo que puedo hacer por mi querida región en este momento. Como siempre digo, tengo ´murcianitis´ y ´trabajitis´ aguda, nada más que hago trabajar, sobre todo, investigando.

¿Cuál es su diagnóstico sobre la situación que vive Murcia?

Hay varios problemas muy importantes, que también afectan a España. Lo que me parece absolutamente transcendental es la llegada del AVE; a ver qué pasa con el ferrocarril. También la apertura del aeropuerto y el Trasvase Tajo-Segura. Qué sería de Murcia sin el Trasvase. Desde niño he vivido todas las vicisitudes del Acueducto. Como profesor universitario, también me preocupa la inserción laboral de los chicos y chicas a los que yo doy clase. Es necesario que conseguir una situación que les permita encontrar un trabajo, que se creen empresas. Es muy importante la actividad económica.

¿Cree que la Región está respondiendo a esa necesidades?

Yo estoy aterrizando, pero visto desde fuera, los números parecen indicar que estamos remontando poco a poco. Todos los análisis de la UE insisten en que hay que conseguir una estabilidad en el empleo. Yo soy un europeísta convencido y creo para España, por mucho que se quieran ver los aspectos negativos, como el rifirrafe de Cataluña, la entrada en la Unión Europea ha tenido una aportación positiva extraordinaria. Las universidades nos hemos beneficiado muchos de las ayudas europeas. También es verdad que Europa está viviendo una situación convulsa en estos momentos, con la incógnita de lo que pasa en Italia, que es la tercera economía del euro. Y aunque no lo parezca, todo esto repercute directamente. Estamos en un mundo globalizado y todo nos afecta, así como la forma de encarar la cuestión de los inmigrantes, que también es importante para Murcia y para España. La gran cantidad de personas que trabajan en la agricultura o en el cuidado de personas mayores no es algo que pueda considerarse insignificante.

Los sindicatos hablan de que en el campo se están produciendo situaciones laborales muy duras.

No conozco esas situaciones. Yo he tenido una relación muy cercana con el mundo agrario y con el cooperativismo agrario desde pequeño, que he vivido en mi propia familia y creo que el sector agrario es muy importante, igual que lo es el resto de los sectores. A ver si el Pacto Nacional del Agua llega y hacemos las cosas bien. Sería importante llegar a acuerdos. A lo largo de mis muchos años de gestión he procurado llegar a acuerdos. Creo que los consensos son muy importantes. También lo veo así por haber vivido en la Transición los Pactos de la Moncloa o los acuerdos para sacar adelante la Constitución. España necesita grandes acuerdos, ahí tenemos el ejemplo de Alemania, lo que son capaces de pactar los partidos germanos.

¿Qué cree que podrá hacer desde el CES por el consenso?

En el CES ha habido personas que he tratado mucho, como Clemente García, Tomás Zamora, Jesús Galiana, gente con la que he tenido oportunidad de hablar mucho, al igual que el propio Pepe Luján e Isidro Ródenas. También con otras personas que siguen ahí, como José Daniel Martín, Pencho Madrid o Miguel Martínez. En el CES hay 24 personas, ocho del mundo empresarial, ocho del sindical y ocho de distintos sectores, como el cooperativismo, el mundo agrario, las sociedades anónimas laborales o la discapacidad. La trayectoria del CES se resume en acuerdos y consensos y habrá que seguir en esa línea para que las posturas que se acuerden sean fruto de unas mayorías lo más amplias posibles.

El CES también debe ser contestatario con el Gobierno.

En un órgano en el que hay representantes de los trabajadores y de los empresarios que puedan decirle al Gobierno que no comulgan con una determinada línea o que las cosas hay que hacerlas de esta manera no puede ser decir ´sí´, ´sí´ y ´sí´ a todo. Si queremos una Región de Murcia mejor, como nadie es perfecto, habrá que decir lo que haya que decir y señalar aquellas cosas que no estén bien planteadas. El CES tiene que informar sobre normas, leyes, decretos y órdenes, pero también sobre todo lo que afecta a la sociedad en general. Yo quiero agradecer a todos los grupos que integran el Consejo el apoyo que me han dado. Me gustaría conseguir que el CES siga teniendo un papel relevante y que sea un lugar de diálogo entre distintos agentes sociales. Y si, además, somos capaces de mejorar, sería estupendo.

¿Se potenciará la especialización de cada fiscal?

Apuesto por mantener lo que son las especialidades, porque es una cosa positiva a nivel de Fiscalía. Sería bueno que se implantase a nivel de jueces. Ahora los jueces se dividen en Civil, Penal... Sería bueno que hubiese jueces especializados en temas de medio ambiente (que incluye derecho animal), en asuntos relacionados con la corrupción, en organizaciones delictivas... En temas de medio ambiente, por ejemplo, ha habido 1.600 procedimientos en un año en toda España. Eso, hace diez o doce años, era impensable.

¿Y en cuanto a la instrucción?

Apuesto por que la instrucción de las causas la lleve el Ministerio Fiscal. Que el fiscal lleve el asunto con la Policía Judicial, como he hecho yo con el Mar Menor, y lo lleve directamente al juzgado. Y entonces se abra un juicio oral con el escrito de acusación. Así, que solamente haya que acudir al juez antes de ese escrito para pedir una orden de entrada y registro o unas escuchas telefónicas.

Esta semana ha vuelto a ponerse de actualidad el tema de las supuestas avionetas antigranizo que, según algunos agricultores, echarían sustancias químicas a la atmósfera que evitan la lluvia. ¿Cree usted que esto es una leyenda urbana?

Que realmente existan estas avionetas... yo no lo descarto. Pero hay un aspecto muy importante, que es la identificación de los responsables. Se cuenta con esa dificultad: cómo se identifica a quien se supone que hace eso. ¿Contra quién diriges una causa así? ¿Quién sería capaz de hacer una cosa de esas? El asunto está muy verde. Aparte, habría que demostrar que se tira desde el aire algo nocivo o tóxico. Y hay que tener en cuenta que el espacio aéreo está controlado.

Por otro lado, ¿cómo va el asunto del Mar Menor, que usted sigue llevando personalmente tras asumir el cargo de fiscal superior?

A la espera de que la juez acuerde la práctica de diligencias. Habrá que tomar declaración a los denunciados. La actuación será inmediata.

¿Llegará el papel cero a los juzgados o es una utopía?

La idea es que no haya papeles. Yo soy muy partidario de las nuevas tecnologías, siempre que se planteen con garantías. La idea es crear una única aplicación que englobe todo. Cuando funcione bien, será una maravilla.

Igualdad

Tal y como ocurre en el Consejo Jurídico de la Región, parece que en el CES tampoco se cumple la paridad.

Efectivamente, en el Consejo Jurídico no se cumplía la paridad y, por lo que he visto, en el CES también es algo que tenemos pendiente. Pero hay que tener en cuenta que las personas que se sientan allí proceden de los distintos sectores y dependen de quién designa para que les representen.

Uno de los problemas más acuciantes en este momento es la financiación autonómica, que ha llevado a la Comunidad Autónoma a acumular una deuda de 9.000 millones de euros

Es un lugar común que la deuda es un problema que hay que ajustar, porque es una asignatura pendiente que tenemos. Si no se llega a acuerdos, la deuda de nuestra Comunidad irá en aumento. Cerrar los ojos a esta realidad no lleva a ninguna parte. Hay que entender que con el ámbito educativo, sanitario y de las pensiones y las ayudas a las personas necesitadas, la deuda seguirá incrementándose si lo solucionamos. Eso no es bueno. Tenemos que procurar que haya un gran acuerdo, porque hay comunidades autónomas mucho mejor financiadas, como las del norte de España.