Miles de personas, sobre todo mujeres, en su mayoría jóvenes, han mostrado hoy en Murcia y Cartagena su indignación por la sentencia de la Audiencia Provincial de Navarra que condena a los 5 miembros de la llamada Manada por un delito de abuso sexual, no de violación, a una joven en Pamplona.

"Es violación, no abuso", "La revolución será feminista o no será", "Hermana, aquí está tu manada", "Esta sentencia es una vergüenza", "Justicia patriarcal, a la mierda una vez más", "La noche y la calle también son nuestras", "Ni la tierra ni la mujer son objeto de conquista", "Somos las nietas de las brujas que no pudisteis quemar" o "Nos queremos libres de miedo" son algunas de las consignas que se han coreado o leído en las pancartas.

"Feminismo o barbarie", "Sobre mi cuerpo decido yo", "Por la erradicación de la violencia machista y la consecución de una igualdad real", "Si tocáis a una, peleamos todas" "No es no", "No decir sí también es no", "la lucha feminista, contra las violencias machistas" eran algunas otras.

A la concentración de Murcia, en la plaza Cardenal Belluga, han asistido la presidenta del Parlamento murciano, la socialista Rosa Peñalver, y los líderes regionales del PSOE, Diego Conesa, y de Podemos, Óscar Urralburu.

Desde los partidos, los portavoces del PP, el PSOE y Podemos en la Asamblea Regional de Murcia se han sumado hoy en el pleno a la repulsa al fallo y la patronal Organización de Mujeres Empresarias y Profesionales de Murcia (OMEP) ha condenado la "execrable violación".

Para la vicesecretaria general y secretaria de Economía, Igualdad de Género y Políticas Públicas del PSRM, Gloria Alarcón, "la sentencia desmonta el inmenso trabajo jurídico y político de haber conceptualizado la violencia de género como una parte importantísima de la protección de las mujeres en la democracia. El fallo dice que aquí no la ha habido".

En su opinión, esta es una consideración jurídica de los hechos contradictoria: "Si ella dijo que no y hubo abuso, es muy difícil que este se produzca sin violencia. El relato es incompatible entre lo que se tipifica y el fallo, entre otras razones porque la situación real era la de una mujer contra cinco hombres".

Las empresarias de la OMEP han lamentado en un comunicado que "leyes antiguas promulgadas por mentalidades ancestrales permitan un castigo atenuado a los culpables. Solo cambiando la ley será posible erradicar actitudes delictivas que dañan definitivamente a las víctimas para toda su vida".

El PCE murciano ha sostenido en una nota que "la sentencia es una muestra más de violencia institucional hacia las mujeres por parte de leyes y jueces que representan el brazo ejecutor del sistema patriarcal".

"Hemos asistido a un proceso en el que desde diferentes ámbitos judiciales y mediáticos se ha llegado a culpar a la mujer agredida e incluso ha presentado como una prueba admisible la "vida normal" de la víctima tras la agresión, como si no tuviésemos derecho a rehacer nuestras vidas, a seguir vivas", concluyen las comunistas.