Albaricoqueros en las comarcas de Río Mula y Vega Alta; alcachofas en Alto y Bajo Guadalentín y en la Huerta de Murcia; almendros en Altiplano, Alto y Bajo Guadalentín, Noroeste, Río Mula y Vega Alta; habas verdes en la Huerta de Murcia; lechugas en el Alto Guadalentín; melocotoneros en la Huerta de Murcia y en Vega Alta; y nectarinas en Altiplano, Huerta de Murcia, Río Mula y Vega Alta. Estas fueron las plantaciones afectadas por las heladas del pasado mes de febrero, que provocaron daños por valor de 29.936.484 euros.

Con esta carta de presentación, el consejero de Agua, Agricultura, Ganadería y Pesca, Francisco Jódar, ha enviado a la ministra del ramo, Isabel García Tejerina, una misiva en la que le pide medidas urgentes para paliar las pérdidas sufridas por los agricultores de la Región.

El consejero explica a la ministra lo ocurrido en los dos periodos de bajas temperaturas (6 y 9 de febrero y 23 y 24 del mismo mes), que se llevaron por delante los cultivos plantados en 23.124 hectáreas, algo más de 28.000 toneladas. Las fincas afectadas estaban tanto en secano como en regadío.

«Dada la magnitud de los daños, solicitamos al Ministerio la elaboración, con carácter de urgencia, de un conjunto de medidas que incluyan indemnizaciones, disminución de las cargas tributarias, concesión de créditos privilegiados y otras ayudas», para paliar el impacto del accidente climático en las rentas de los agricultores, apostilló Jódar en la carta.

La carta va a compañada por el el informe pormenorizado y detallado de cada una de las zonas afectadas, que ha sido elaborado por la secretaría general de la Consejería y el servicio de coordinación de Oficinas Comarcales Agrarias.

Seguros agrarios

La mayoría de las plantaciones, sobre todo en la comarca de Cieza y en las plantaciones con variedades extratempranas, están aseguradas, si bien los agricultores se quejan de que las pólizas apenas cubren los daños.

El secretario de Agricultura de UPA, Antonio Caballero, uno de los afectados, expuso la necesidad de «que las ayudas para contratar los seguros retornen a las cifras que había antes de la gran crisis de 2009».

Como tantas otras cosas, lamentó, la recesión se había llevado por delante las subvenciones nacionales y regionales al seguro agrario.