Un total de 2.536 desempleados de la Región invirtieron en 2017 su prestación por desempleo para iniciar una actividad empresarial como trabajadores autónomos, o bien para incorporarse como socios a una cooperativa o a sociedades laborales, según el Servicio de Empleo Estatal (SEPE).

En concreto, 1.820 hombres y 716 mujeres, eligieron esta modalidad de cobro del paro que permite obtener en un solo pago la cantidad de la prestación, que se justifica como inversión necesaria para cubrir los primeros gastos derivados del inicio de un trabajo por cuenta propia como la reforma de un local o la compra de equipos.

De esta manera, de los 2.536 murcianos en desempleo que se acogieron a este sistema de cobro del paro el año pasado, 2.210 lo hicieron para establecerse como autónomos, mientras que 175 lo usaron para constituirse en socio de una cooperativa. Este cobro único también permitió a 80 desempleados poner en marcha una sociedad limitada y a 71 montar una sociedad mercantil.