Un centro en el que se promociona la salud y se lucha contra la enfermedad no puede poner a la venta productos que van en contra de este mensaje. Con esta máxima los hospitales del Servicio Murciano de Salud (SMS) han comenzado a incorporar en los últimos días fruta fresca en sus máquinas expendedoras. Los primeros han sido el Virgen de la Arrixaca de Murcia y el Santa Lucía de Cartagena, quienes están marcando la pauta que deben seguir el resto de centros sanitarios, quienes ya están tomando ejemplo.

De un día para otro no se pueden cambiar los hábitos de la población, pero ya han comenzado a darse los primeros pasos para acabar instalando máquinas cien por cien saludables. Por el momento la Arrixaca y el Santa Lucía han sumado ya en sus productos las mandarinas y las manzanas, que se ofrecen en unos envases cilíndricos transparentes en los que el consumidor puede ver perfectamente el estado de la fruta.

La Consejería de Salud ya indicó a los centros que en los nuevos expedientes de contratos debían incorporarse las recomendaciones nutricionales recogidas en el documento de consenso sobre alimentación en los centros educativos de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan), incluyéndose la fruta fresca entera o mínimamente procesada que no contenga azúcares añadidos.

Desde el SMS explican que «hay que potenciar y favorecer el consumo de alimentos saludables y evitar el de determinados productos considerados no saludables», por ello, todos los productos ofertados en las máquinas que se instalen deberán cumplir las recomendaciones nutricionales indicadas, de modo que se promueva una alimentación saludable en el entorno hospitalario.

Así, las empresas licitadoras deberán presentar una relación de productos indicando marca, componentes nutricionales y dosificación que se expedirán en las máquinas en caso de ser adjudicatarios, así como el número de canales de distribución que utilizarán en cada máquina por producto. Además, la empresa contratista será responsable del buen estado sanitario de los alimentos y bebidas que se expidan en sus máquinas. En su oferta indicará la frecuencia con que éstos serán renovados, aunque no sean consumidos.

La empresa Fru&tube, cuyos responsables cuentan con raíces murcianas, es la que está potenciando la instalación de este tipo de máquinas cien por cien saludables, un proyecto que ha arrancado en Madrid y que se está extendiendo a otras comunidades autónomas. Su fundador y CEO, Carlos Méndez, reconoce a LA OPINIÓN que son ellos los que están suministrando la fruta que ha comenzado a llegar a los hospitales murcianos, aunque no directamente, sino a través de los operadores que tienen la concesión de esos centros, «quienes nos piden referencias concretas, como las manzanas y mandarinas, para ir introduciendo la fruta».

En centros como la Universidad Rey Juan Carlos de Móstoles o la Escuela Nacional de Sanidad ya cuentan con máquinas exclusivas de alimentos sanos en las que los usuarios pueden encontrar fruta fresca (fresas, uva, mandarinas, manzanas, cerezas, plátano o peras), así como frutos secos naturales (sin nigún tipo de procesamiento de tostado o fritura) y frutas deshidratadas. A esto se unen también zumos naturales y tés.

Méndez explica que en algunos casos se han encontrado con las reticencias de los operadores que se encargan de las máquinas expendedoras. «Ellos buscan la comodidad y, en este caso, la fruta requiere una mayor atención y control para vigilar la caducidad y que está en buen estado», afirma. Para ello, Fru&tube cuenta con un sistema de telemetría al que están conectadas las máquinas y que les permite comprobar a distancia las ventas, los productos que faltan en cada una y ampliar el número de carriles de las frutas más demandadas.

En este caso reconoce que el consumo de fruta aumenta con las buenas temperaturas, ya que durante los meses de invierno cada máquina puede tener entre 30 y 40 ventas al día, mientras que en primavera y verano éstas suben hasta las 60-70 ventas diarias. Además, aprovecha para pedir a las administraciones que se impliquen con políticas como la puesta en marcha por la Consejería de Salud murciana que permite abrir espacio como los hospitales a los alimentos saludables.

El Servicio Murciano de Salud también recuerda que los alimentos que se ofrezcan en estas máquinas deben estar correctamente envasados y etiquetados, de conformidad con la normativa específica vigente, indicándose en su envoltorio la composición de los mismos. Siendo, también el precio y la calidad de cada producto idéntico en todas las ubicaciones.