Un total de 250 jóvenes se convertirán en 'misioneros' por unos días en esta Semana Santa para ayudar a diez párrocos de la Región. Esta experiencia forma parte del apostolado del Regnum Christi 'Juventud y Familia Misionera'.

Los participantes en esta acción se pondrán al servicio de los párrocos diocesanos que en este momento litúrgico, desde el Jueves Santo hasta el Domingo de Resurrección, tienen una gran carga de trabajo. Su labor consistirá en dar testimonio de su fe por las calles y las casas, ayudar a preparar los oficios y las celebraciones, visitar a los ancianos y los enfermos.

El lema que encabeza la misión este año, 'La luz de Jesús', responde al impulso misionero del Papa en Evangelii Gaudium: "Todos somos invitados a aceptar esta llamada: salir de la propia comodidad y atreverse a llegar a todas las periferias que necesitan la luz del Evangelio".

A Murcia acudirán 250 jóvenes de toda España para servir de apoyo en 10 parroquias de Cartagena, Puerto de Mazarrón, Cabezo de Torres y Churra. Otro pequeño grupo misionará en pueblos de Segorbe (Castellón), un tercero en Ponferrada y otra unidad de jóvenes de Barcelona lo hará en Solsona (Lérida).

Los sacerdotes reciben a los ayudantes con ilusión, como Juan Francisco Soler, párroco en Utrillas, Las Parras de Martín, La Hoz de la Vieja, Maicas y Plou (Teruel), poblaciones compuestas mayoritariamente por personas mayores, muchos jubilados de las minas de carbón.

"Me aportan alegría, experiencia de encuentro con Cristo, esfuerzo y sacrificio de desplazarse toda la familia haciendo muchos kilómetros, la comunión entre padres e hijos y la fe en Dios", dice Soler sobre estos 'misioneros'.

Julio Sánchez acude con su mujer y sus cinco hijos a Piloña y Cabranes (Asturias) para apoyar a dos párrocos Israel y Felipe, que tienen a su cargo más de 17 pueblos. "Los hombres y mujeres de allí nos enseñan el amor a su pueblo y a su cultura --cuenta Julio--. Son generosos, nos acogen y en ese encuentro he aprendido a encontrarme a mí mismo, a ver a Cristo en el prójimo en un contexto fuera del mío, en sitios inesperados".

También hay lugares a los que llegan por primera vez, como en el caso de Burgohondo (Ávila), donde llegarán 20 familias, muchas de ellas con hijos adolescentes. "Salimos de nosotros mismos, dejamos comodidades y planes personales, y buscamos sentirnos y hacer sentir Iglesia", señala Miguel Osorio.

Muchas familias misioneras proceden de los colegios Regnum Christi de España, como Everest Monteclaro, Highlands Los Fresnos, Highlands El Encinar, Highlands Sevilla, Cumbres School Valencia, Reial Monestir de Santa Isabel o Highlands Barcelona.

"A los niños no hay que explicarles la Semana Santa: en esos días pasa algo mucho más grande, y es que viven la Semana Santa. ¡Qué mejor que poder experimentar y compartir en familia y de la mano de la Iglesia, que Jesús está vivo!", dice Beatriz, de Valencia, que este año repetirá junto a su marido y sus cuatro hijos.