Un total de 38 enfermeros denunciaron una agresión por parte de pacientes o familiares el pasado año en la Región de Murcia. En este caso las áreas de Salud donde existe más riesgo son la VIII (Mar Menor) y la VII (Reina Sofía), seguidas de Lorca y la Arrixaca.

Así lo recogen los datos presentados esta mañana por Satse en Murcia dentro de la campaña #StopAgresiones que han iniciado a nivel nacional durante el mes de marzo y con la que quieren llamar la atención sobre este problema y buscar soluciones.

El responsable de Prevención de Riesgos Laborales de Satse Murcia, Temístocles Sánchez, cree que la solución pasa por no limitar las contrataciones de vigilantes de seguridad, "ya que su presencia disuade al agresor", y aumentar las plantillas. Hay que tener en cuenta que entre las causas más comunes de agresiones físicas o verbales al personal sanitario se encuentran las esperas para ser atendido debido a la sobrecarga de trabajo.

Según las cifras oficiales del SMS las 38 agresiones a enfermeros contabilizadas en 2017 suponen la mitad de las de 2016, cuando se registraron 78. Pero Satse no está de acuerdo con estos datos y asegura que "no son reales".

El acumulado con el que cuenta el Sindicato de Enfermería muestra que entre 2009 y 2016 se registraron en la Región de Murcia un total de 1.939 agresiones a sanitarios de las que 958 se produjeron en Atención Primaria, 760 en Especializada y 144 en atenciones del servicio de emergencias del 061.

La encargada del área del IMAS dentro de Satse, Mercedes García, también ha llamado la atención sobre la situación que viven las enfermeras que trabajan en residencias, profesionales que en 2016 sufrieron 131 agresiones en la Región de Murcia. En este caso ha criticado que "las residencias de mayores han pasado a convertirse en hospitales de cuidados medios".