No es la primera vez que se pone sobre la mesa -ya lo han hecho otros ministros antes que él- pero sigue creando polémica. Se trata de la propuesta del ministro de Educación, Íñigo Méndez de Vigo, de implantar un MIR educativo para los profesores antes de acceder a la función docente.

Los sindicatos CC OO y UGT lo rechazan de plano, mientras que Anpe adopta una postura más matizada y condicionada. Por su parte, la consejera del ramo, Adela Martínez-Cachá, apuntó que esta iniciativa se basa «en un buen modelo, como es el MIR sanitario, pero para adaptarlo a este colectivo».

Cachá destacó que «no deja de ser una propuesta que se tiene que consensuar en el marco del Pacto nacional por la Educación; no hay nada cerrado y tampoco ha expuesto el ministro los detalles», por lo que criticó las negativas sindicales.

Por último, dijo que «el único objetivo es lograr una educación de calidad, que es lo que demanda la sociedad».

El ministro de Educación, Íñigo Méndez de Vigo, anunció que propondrá en el marco del Pacto Nacional por la Educación un nuevo modelo de acceso a la función docente que incluya un programa de formación práctica tutorizada, «una especie de MIR de dos años de duración, en el que se trabajen todas y cada una de las funciones asociadas a la docencia».

El ministro Méndez de Vigo precisó que esa formación no debe limitarse a una especialidad concreta, sino también a técnicas pedagógicas, metodología, recursos y práctica supervisada.

Comisiones Obreras en la Región dice un «no» a esta 'residencia educativa'. «Es una ofensa al colectivo, sin más efecto que ahondar en la precariedad del trabajo docente y que provocaría más rotación en los centros», apuntó el portavoz de la sección de Educación, Diego Fernández.

CC OO subrayó que el ministro evita el centro del debate actual: la infrafinanciación del sistema educativo y los recortes como claves de los problemas actuales. «El sistema funciona a pesar de la política ministerial gracias a la dedicación del profesorado», concluyó, recordando que todos los docentes antes de impartir enseñanzas pasan por periodos de prácticas de un año antes de obtener el título de maestro.

En parecidos términos se manifestó Alfonso Vera, responsable de Educación en UGT. «Lo primero que hay que decir es que el ministro debe empezar a ser ministro de Educación y dejarse de ocurrencias».

Para los ugetistas, donde primero se tiene que centrar el debate es «en ver qué Pacto queremos, en lugar de volver locos a los estudiantes con este tipo de anuncios y declaraciones».

Vera se temió que detrás de esta nueva propuesta se esconde un viraje hacia la financiación de las enseñanzas privadas, «promoviendo más másteres que se puedan ejercer en universidades privadas que ofrecen plazas a diestro y siniestro y sin números clausus».

UGT considera que lo primero que se tendría que hacer es derogar la LOMCE; después alcanzar un Pacto por la Educación que no pueda sufrir los avatares de los cambios de Gobierno; y a partir de entonces entrar en planteamientos como el MIR «o lo que quiera, pues de otra manera lo que nos está imponiendo es su modelo educativo», destacó Vera.

Estatuto docente

El más moderado en sus planteamientos fue el sindicato Anpe, mayoritario en la Región.

Su presidente, Clemente Hernández, señaló que «es imprescindible abordar la situación del profesorado y su futuro profesional», por lo que el pacto educativo que se está gestando «debe acordar medidas de reconocimiento, apoyo y valoración de la tarea docente».

Anpe apoya ese MIR educativo, pero si se implanta dentro de una ley de la profesión docente y de un estatuto docente. «Debe buscar un equilibrio entre experiencia docente y formación académica, y reforzar el proceso de selección previa y el periodo de prácticas de los aspirantes, con una duración uniforme para todo el territorio nacional», dijo, y añadió que «podría ser un buen sistema de futuro si consiguiésemos prolongarlo con una verdadera carrera profesional y dentro un conjunto de reformas del sistema educativo».

Además, reclaman un plazo de cinco años antes de ponerlo en marcha.