La consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Violante Tomás, presentó ayer el diseño de la nueva tarjeta de estacionamiento para discapacitados en la Región, que se adapta al modelo comunitario y será efectiva en otros países miembros de la Unión Europea. La consejera se reunió ayer con el presidente del comité de representantes de personas con discapacidad y sus familias (Cermi-Región de Murcia), Pedro Martínez, y miembros de su Junta Directiva, para informarles del decreto que aprobó el Consejo de Gobierno el pasado miércoles. Un total de 25.179 personas con discapacidad que presenten movilidad reducida podrán beneficiarse del nuevo distintivo en la Región de Murcia.

La tarjeta se adapta a una reciente resolución del Parlamento Europeo que solicita a los estados miembros que garanticen el reconocimiento mutuo de los documentos nacionales de identificación de las personas con discapacidad, con vistas a hacer efectiva la libre circulación de estas personas dentro de la Unión Europea. Tomás explicó que «las tarjetas serán expedidas por los ayuntamientos, a petición de las personas interesadas. Las entidades locales cotejarán los datos del solicitante con la valoración del grado de discapacidad y movilidad reducida dictaminadas por los equipos de calificación y reconocimiento del grado de discapacidad del IMAS)».

Según el decreto, también se reconocerá como beneficiarios de la tarjeta a las personas con deficiencias visuales, que era una de las solicitudes del Cermi. «Podrán solicitar la tarjeta aquellos que muestren en el mejor ojo una agudeza visual igual o inferior al 0,1 con corrección, o un campo visual reducido a 10 grados o menos, dictaminada por equipos multiprofesionales de calificación y reconocimiento del grado de discapacidad del IMAS», declaró la consejera.

Asimismo, podrán obtener de la tarjeta las personas físicas o jurídicas titulares de vehículos destinados exclusivamente al transporte colectivo de personas con discapacidad que presten servicios sociales de promoción de la autonomía personal y de atención a la dependencia. Deberá renovarse cada 10 años.

Entre los derechos reconocidos a los propietarios de la tarjeta está la reserva de plaza de aparcamiento en lugar próximo al domicilio o puesto de trabajo, el aparcamiento en los lugares habilitados para las personas con discapacidad, sin que pueda establecerse limitación horaria alguna al ejercicio de este derecho, el estacionamiento en las zonas de aparcamiento de tiempo limitado durante el tiempo necesario, y la parada o estacionamiento en las zonas reservadas para carga y descarga, siempre que no se ocasionen perjuicios a los peatones o al tráfico, por un tiempo de parada o estacionamiento como mínimo un 75 por cierto superior al permitido con carácter general en dichas zonas.

Para facilitar su movilidad, los titulares de las tarjetas de estacionamiento para discapacitados podrán estacionar en cualquier lugar de la vía, por motivos justificados y por el tiempo indispensable, siempre que no se ocasionen perjuicios a los peatones o al tráfico y de acuerdo con las instrucciones de los agentes de la autoridad y el acceso a vías o espacios urbanos con circulación restringida a residentes, entre otros.