La Mancomunidad de Canales del Taibilla (MCT) ha concluido una serie de obras de emergencia por valor de 11, 4 millones de euros para poder readaptar sus redes y hacer frente a las nuevas demandas de agua surgidas por la extrema sequía.

El cierre del trasvase del Tajo al Segura ha obligado a potenciar el uso de las plantas desalinizadoras ubicadas junto al mar. Esto ha supuesto un cambio de escenario porque las canalizaciones no estaban preparadas para impulsar el agua desde la costa hacia el interior, dado que hasta ahora funcionaban al inversa y por gravedad.

Para sortear esa dificultad se han puesto en marcha una serie de infraestructuras que posibilitarán llevar agua desalinizada para consumo doméstico a más municipios e introducir en el sistema 15 hectómetros cúbicos adicionales cada año.

El agua desalinizada supone hoy la principal fuente de suministro para los 80 municipios de Murcia, Alicante y Albacete que son abastecidos a través de Mancomunidad.

La situación ha dado un giro de 180 grados en el último año. En noviembre de 2016 el agua que salía por el grifo de los usuarios procedía en un 26% del Taibilla, un 28% de desalación y un 46% del trasvase del Tajo.

Un año después esos porcentajes han cambiado y la desalinización supone el 62% del total, mientras que el aporte del Taibilla se ha mantenido y el del Tajo ha desaparecido, supliéndose en parte (12%) con recursos extraordinarios procedentes, en su mayor parte de los acuíferos.

El presidente y el director de la Mancomunidad del Taibilla, Adolfo Gallardo y Carlos Conradi, respectivamente, explicaron explicar cuáles son los cambios que se han tenido que acometer para reordenar toda esta situación y, en definitiva, garantizar que el agua potable siga llegando sin restricciones a una población que suma cerca de 2,5 millones de personas.

Ambos indicaron que para poder potenciar el uso de agua desalinizada se han llevado a cabo cuatro obras de relevancia.

En Jacarilla, junto al embalse de La Pedrera (Alicante), se ha habilitado un depósito con capacidad para 60.000 metros cúbicos de agua. Esta infraestructura actuará como un centro de reparto y recibirá agua desalinizada procedente de la planta de Torrevieja (Alicante) y de las dos de San Pedro del Pinatar. Con ello se dará servicio la zona costera de la Vega Baja, Alicante, Murcia y Cartagena.

Otra de las novedades ha consistido en reforzar la estación de elevación de agua ubicada en Benferri, que sirve para derivar agua a Alicante y Murcia.

Hasta ahora tenía capacidad para elevar 900 litros de agua por segundo y ahora podrá hacer lo propio con 1.150 litros, lo que posibilitará el reparto de un mayor caudal. También se ha actuado en el canal que lleva el agua hasta Alicante, con una capacidad adicional para transportar 5 hm3 de agua procedente de desalinizadoras.

En la planta de Águilas se han hecho cambios para poder introducir tres hectómetros cúbicos en las redes de la Mancomunidad y llevar agua hasta Lorca y el Valle del Guadalentín.

Con toda esa serie de modificaciones, financiadas por el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (MAPAMA), la MCT asegura que será capaz de introducir en el sistema 15 hectómetros cúbicos más de agua desalinizada. Ello permitirá poner en marcha plantas como la de Mutxamel (Alicante), que actualmente apenas tiene actividad. «Con estas obras de emergencia conseguimos garantizar que a la mayor parte de la Mancomunidad llegue el agua desalada», dijo Conradi.