Los sindicatos dan por hecho que la fusión de BMN con Bankia supondrá la desaparición de los servicios centrales del grupo bancario que lideraba Cajamurcia, en los que trabajan 280 personas, repartidas entre las sedes de la Gran Vía y la avenida Juan Carlos I de Murcia. Por su parte, Bankia sostiene que parte del personal podrá seguir trabajando en la nueva dirección territorial, que abarca las oficinas de la Región y las de la provincia de Alicante.

La fusión ha supuesto ya el cierre de 25 oficinas de BMN a finales de 2017 (10 de ellas en la Región), a las que se sumarán otras 22 a principios de este año. Por su parte, Bankia cerrará 99 oficinas, entre ellas la de la calle San Pedro de Murcia (con lo que solo mantendrá cuatro en la capital) y tres heredadas de BMN en el Polígono de Alcantarilla, la Colonia de San Esteban de la capital y la oficina de empresas de Cartagena, según informó el secretario de la sección sindical de UGT en la entidad, Jesús Vázquez.

BMN había garantizado el traslado o la recolocación a los trabajadores de las oficinas cerradas. Ahora Bankia deberá negociar el destino de los 280 empleados pertenecientes a la sede central de BMN en la Gran Vía de Murcia y a los servicios informáticos situados en la avenida Juan Carlos I. Bankia sostiene que parte del personal seguirá trabajando en su dirección territorial, de la que dependerá un elevado número de oficinas de Murcia y Alicante. Aunque se esperaba que este jueves arrancaran las negociaciones del ERE planteado por Bankia para reducir la plantilla en 2.500 personas, la mesa negociadora no ha sido convocada. Los sindicatos aspiran a conseguir que la entidad rebaje de 57 a 55 años la edad para acogerse a las prejubilaciones.