Estamos en una situación crítica. Así lo ha reconocido el propio director general de Asistencia Sanitaria del Servicio Murciano de Salud (SMS), Roque Martínez, ante la epidemia de gripe que está barriendo la Región y que está dejando cifras de pacientes afectados que no se recuerdan antes en la Comunidad. Sólo el pasado martes, 2 de enero, fueron diagnosticados en un día 1.461 nuevos casos de gripe en los servicios sanitarios, prácticamente la mitad de todos los contabilizados la semana anterior, del 25 al 31 de diciembre, cuando se llegó a los 3.765 casos.

Las puertas de Urgencias de los hospitales se encuentran desbordadas, así como las UCI y los SUAP (Servicios de Urgencias de Atención Primaria), que están viendo aliviada en parte la presión asistencial gracias a la apertura de los centros de salud y consultorios desde el martes, que permanecieron cerrados sábado, domingo y lunes por los días festivos. Pese a todo, el virus de la gripe está arrasando este año entre los murcianos, alcanzando el martes una tasa de incidencia de 500 casos por cada 100.000 habitantes, «una tasa altísima que no se da desde hace muchos años», recuerda Martínez, ya que la semana con más incidencia de gripe del pasado año se llegó a los 230 casos por cada 100.000 ciudadanos, una cifra que se ha duplicado esta semana y que se prevé que siga en aumento.

Refuerzo de plantillas

Desde el fin de semana los hospitales han comenzado a contratar personal de refuerzo para aumentar sus plantillas, con más de un centenar de incorporaciones en los hospitales Virgen de la Arrixaca (54); Santa Lucía (37); Reina Sofía (21) y Morales Meseguer (3), entre otros. Sin embargo, el Servicio Murciano de Salud ha monitorizado la actividad diaria para ver cómo evoluciona la epidemia y tomar decisiones en función de su gravedad. «Seguiremos aumentando las contrataciones en los próximos días», afirma el director general de Asistencia Sanitaria, que recuerda que también se han reforzado SUAP como los de San Andrés, Infante, Algezares, Alcantarilla, Molina de Segura, Santomera, Torres de Cotillas y Águilas.

Roque Martínez señala que «la situación es muy complicada» y reconoce que los hospitales se han visto desbordados con una afluencia masiva de ciudadanos que ha hecho que el martes se vieran en los servicios de Urgencias hospitalarias de la Región 3.169 pacientes, frente a los 2.000 casos de media que se ven habitualmente. En el Hospital Materno-Infantil de la Arrixaca también han descendido las atenciones, ya que se ha pasado de las 328 urgencias atendidas el 1 de enero a 237 pacientes atendidos el martes, día 2. Un descenso que se debe, principalmente, a que los pediatras comenzaron a pasar consulta en los centros de salud y consultorios, lo que hizo que fueran menos niños a Urgencias.

«Es una auténtica avalancha», afirma el responsable de Asistencia Sanitaria, quien señala que también se ha dejado notar en Atención Primaria, donde los médicos de familia atendieron el martes a 3.068 pacientes más que el mismo día del pasado año 2017.