El Ayuntamiento de Madrid se está planteando llevar la protesta de los regantes del Acueducto Taj0- Segura a la plaza de Callao, en la Gran Vía, después de reconsiderar la posibilidad de permitirles concentrarse en la Puerta del Sol, según explicó ayer el presidente del Scrats, Lucas Jiménez. Los regantes del Trasvase, que ya se han manifestado en Murcia y en la desaladora de Torrevieja para reclamar al Gobierno un riego de socorro, han decidido llevar su protesta a Madrid, aunque tropiezan con las dificultades para conseguir la autorización del Consistorio madrileño. La pretensión del Círculo del Agua, en el que están representados también los regantes de Alicante y de Almería, era convocar esta nueva movilización para principios de año, pero Lucas Jiménez dejó claro ayer que la fecha definitiva dependerá de la autorización del Ayuntamiento de Madrid, que aún no ha concretado donde podrá celebrarse la protesta ni el itinerario de la manifestación por las calles de la ciudad. Añadió que estos trámites pueden obligar a aplazar la convocatoria hasta finales de febrero o princios de marzo. Al igual que en anteriores convocatorias, los regantes se proponen llamar la atención de los ciudadanos con el reparto de frutas y verduras.

El objetivo es conseguir que el Gobierno autorice un riego de socorro de unos 60 hectómetrós cúbicos mediante un decreto que sería convalidado posteriormente en el Parlamento. No obstante, Lucas Jiménez reconoció que el hecho de que el Ejecutivo de Mariano Rajoy esté en minoría añade nuevas complicaciones a una decisión que considera imprescindible para evitar que se pierdan 44 millones de árboles.

Aunque el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, visitará hoy la Región y asistirá a un acto del PP, Lucas Jiménez aseguró que no tenía previsto ningún encuentro con el jefe del Ejecutivo ni había sido invitado, pero considera que tendrá que pronunciarse inevitablemente sobre la cuestión del agua. Defendió que el Estado está obligado a dar soluciones a la falta de caudales de igual forma que garantiza el suministro de otros servicios necesarios a los ciudadanos. «El agua es un bien público y tiene que distibuirlo entre todos los ciudadanos por igual».

Respecto a la denuncia de la Fiscalía que investiga los vertidos al Mar Menor, dijo que «al fiscal hay que dejarlo trabajar», aunque dejó claro que «no hay una única causa de contaminación» de la laguna.