La Dirección General de Tráfico ha desplegado un dispositivo especial para los 300.000 desplazamientos previstos en las carreteras de la Región durante el Puente Constitución-Inmaculada, que comenzó ayer y concluirá a las 24 horas del domingo.
El delegado del Gobierno, Francisco Bernabé, informó de que cerca de 220 agentes de la agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, apoyados por otros 260 de la Comandancia y de las policías locales, establecerán servicios de control, regulación y vigilancia extraordinarios.
Bernabé indicó que adaptar la conducción al frío propio de esta época es una de las principales y habituales recomendaciones de la Jefatura Provincial de Tráfico durante este puente. «Hay medidas básicas para esta época, como llevar siempre las luces encendidas, reducir la velocidad, aumentar distancia de seguridad, circular con una marcha inferior o llevar cadenas, el móvil cargado, depósito lleno y ropa de abrigo».
El delegado recordó que el año pasado, durante este mismo puente, se produjeron 54 accidentes con víctimas, «aunque no hubo que lamentar ningún fallecido y sólo cinco personas precisaron de atención hospitalaria», se congratuló.
Aun así, el delegado del Gobierno en la Región apeló a la prudencia y responsabilidad de los conductores para no incrementar las cifras de accidentalidad, que hasta el 3 de diciembre de 2017 registran 41 víctimas mortales en vías interurbanas, ocho más que en el mismo periodo de 2016.
