Son casi doscientos profesionales y con una edad media de 55 años. De 9 a 17 horas se dedican a la atención de más de mil niños y niñas de entre 0 y 3 años, repartidos entre las 14 escuelas infantiles públicas que dependen de la Comunidad Autónoma. Y clases de hasta 6 alumnos. Ese es el perfil de los educadores, un colectivo que lleva más de 20 años reivindicando mejoras laborales y que se sienten olvidados por la administración regional.

Ayer, un grupo de estos profesionales planteó ante la Comisión de Educación de la Asamblea Regional su situación y lo que quieren mejorar, porque hay situaciones «que nadie entiende que se estén produciendo», según su portavoz, Miguel Hernández.

En primer lugar, y sobre todo, reclaman ser considerados personal docente (ahora son funcionarios pero no adscritos a Educación), y han pedido a los partidos políticos que les apoyen para ser incluidos como tales en el futuro Estatuto Básico del Empleado Público de la Región de Murcia, cuyo primer borrador se espera que llegue a la Asamblea el próximo año.

Además, reclaman una tasa de reposición del 100%, que se cubran las bajas «inmediatamente», que exista un plan de reubicación de los educadores que necesiten un cambio por razones psicológicas, emocionales y físicas; y que se elabore un plan de jubilación parcial para poder dejar el trabajo antes de los 65 años

Los partidos políticos tomaron nota y se comprometieron a trabajar para mejorar sus condiciones, aunque dejaron claro que algunas propuestas dependían del Ministerio, como el ser considerados personal docente o lograr la tasa de reposición del 100%.