La economía murciana «mantiene la pujanza de los últimos trimestres», a pesar de las amenazas que la sequía y la incertidumbre provocada por el conflicto catalán proyectan sobre las expectativas de futuro, según indica la Croem en su último Boletín de Coyuntura correspondiente al tercer trimestre del año. La patronal apunta que entre julio y septiembre se ha producido «un viraje en el tejido empresarial», que ha dejado de reducirse para ofrecer un balance positivo con 375 empresas y 1.214 autónomos más de alta en la Seguridad Social que hace un año. Aunque la Croem estima que «el futuro inmediato va a estar condicionado por el aumento de la incertidumbre asociada a la crisis en Cataluña», destaca que la Región había crecido un 0,8% respecto al segundo trimestre y un 3,1% en relación al año anterior, mientras que apunta una previsión de entre el 2,1% y el 3,4% para todo 2017.

La patronal recuerda que «en territorio catalán se encuentran algunos de los principales proveedores y clientes de las empresas murcianas. Por tanto, el potencial impacto de lo que allí ocurra será similar o ligeramente mayor en Murcia que en otras regiones españolas». Advierte igualmente de que «si la tensión política que ha presidido la situación de Cataluña en los últimos meses se prolonga más allá de las elecciones del 21 de diciembre, sin duda terminará teniendo un impacto en el crecimiento económico catalán y nacional».

La agricultura acusa la falta de agua, con caídas importantes de la producción en algunos cultivos, como el tomate, que baja un 13,8%, mientras que el melocotón aumenta un 16,5%. A pesar de estos nubarrones, el Boletín de Coyuntura destaca que Murcia ha sido la segunda comunidad con el mayor aumento de la producción industrial, que alcanza el 5,4% en el tercer trimestre, debido al tirón de la energía y la electricidad. La industria de la madera y el corcho aumenta un 25%, aunque la fabricación de muebles desciende un 1,3%; la fabricación de plásticos aumenta un 10,1% y la metalurgia, un 10,2%. Por el contrario, retroceden artes gráficas y reproducción (11,7%), cuero y calzado (9,8%), confección de (7,6%), captación, depuración y distribución de agua (3,8%) y reparación e instalación de maquinaria y equipo (2,6%). A pesar del comportamiento de estos sectores industriales, los autores del informe destacan que «la entrada de pedidos industriales registró una tasa muy positiva hasta septiembre», con un repunte del 15%, mientras en España aumentaba un 8,8%. «La cifra de negocios también aumentó un 15,7% frente al 7,7% de media nacional, hechos que podrían venir explicados por el aumento del precio de los carburantes», según indican los autores.

Por su parte, el sector servicios crecía un 4,8% en los nueve primeros meses del año (4,1% entre julio y septiembre), mostrando una tendencia relativamente estable, pero que se aleja progresivamente de la ascendente dinámica nacional (6,5%). A su vez, el turismo ha marcado un récord con la llegada de 525.676 viajeros en el tercer trimestre, la cifra más elevada de la serie histórica, aunque los ingresos por habitación (47 euros ) y el grado de ocupación (62%) quedan bastante por debajo de la medias nacionales (76 euros y 77% de ocupación).