Los conductores que desde ayer circulen sin cinturón de seguridad y sean captados por alguna de las 50 primeras cámaras que la Dirección General de Tráfico (DGT) tiene instaladas en carretera, 3 de ellas en la Región, para controlar el uso de ese dispositivo recibirán en su domicilio la correspondiente denuncia.

La DGT señala que esta medida es continuación de la acción realizada en los dos meses anteriores, en los que Tráfico envió únicamente una carta informativa a los conductores, pero no han sido multados.

Tráfico ha enviado 331 cartas informativas a los conductores que fueron captados sin cinturón, ya que solo se envían las fotos que no ofrecen duda alguna sobre el no uso de dicho dispositivo de seguridad.

Las imágenes captadas por las cámaras, añade la DGT, están sometidas a un «severo control de calidad» por un software específico.

Las imágenes en las que el software no identifica el cinturón de seguridad pasan a ser revisadas manualmente por dos operadores, que descartan todas aquellas fotos sobre las que pudiera existir duda.

Una vez identificado el conductor, se procede al envío de la denuncia, que supone una multa económica de 200 euros y la detracción de 3 puntos. Progresivamente, empezarán a funcionar más cámaras hasta un total de 227.

Las cámaras instaladas en la Región están situadas en la A-7, a la altura de la salida hacia Santomera (kilómetro 554,75), en dirección a Murcia. En la A-30, a la altura de Ricote (kilómetro 112,90), en dirección a Albacete y en la A-30, a la altura de la salida hacia Cieza (kilómetro 98,5), en dirección a Murcia.