El Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente ha emitido un informe de impacto ambiental favorable a la extracción de aguas subterráneas del Sinclinal de Calasparra a través de los pozos de sequía de la Mulata, pero ha informado negativamente el proyecto referido al acuífero de El Molar (situado en el municipio de Calasparra) a través de pozos de sequía. Ambas acuíferos pertenecen a la cuenca del Segura.

Una de estas resoluciones, que fueron publicadas ayer viernes en el Boletín Oficial del Estado (BOE), se emite un informe favorable al proyecto de extracción de tres hectómetros cúbicos anuales, en el término municipal de Calasparra, propuesto por la Comunidad de Regantes del Trasvase Tajo-Segura, en la zona de Calasparra-Cieza.

La propuesta no favorable afecta al proyecto planteado por las comunidades de regantes de Águilas, Pulpí (Almería), Mazarrón y Puerto Lumbreras, que habían solicitado extraer seis hectómetros cúbicos de agua anuales del acuífero de El Molar.

En este caso, añade la resolución, la negativa obedece a que «previsiblemente produciría impactos adversos significativos sobre el medio ambiente».

Además, el Ministerio argumenta que «se considera que las medidas previstas por el promotor no son una garantía suficiente de su completa corrección o de su adecuada compensación».

«Futuro oscuro»

Por otra parte, el presidente del Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura, Lucas Jiménez, insistió ayer en que se presenta «un futuro muy oscuro» para la agricultura murciana, alicantina y almeriense si no llueve, y que están abiertos a nuevas posibilidades de llegada de agua, «vengan de donde vengan».

Jiménez volvió a defender la importancia del Trasvase Tajo-Segura, que no envía agua desde mayo, para el presente y el futuro de la Región. «El miedo que hay es real, hemos avisado muchas veces de que el lobo nos mordía y nunca antes hemos tenido tan cerca sus fauces», dijo ante las pérdidas que puede ocasionar en la agricultura la falta de recursos.