Todo parecía idílico para el sector agrario allá por los meses de marzo y abril, cuando veían que sus cosechas no se habían visto afectadas ni por heladas, ni por el pedrisco ni por las plagas. Creían entonces que la campaña 2017 iba a ser histórica positivamente hablando. Sin embargo, en mayo llegó el momento de recolectar y se encontraron con un gran problema: en los principales países europeos que importan la fruta de la Región seguía haciendo frío y, con ese ambiente, sus habitantes no suelen consumir fruta en fresco. Mientras en los almacenes de manipulación se agolpaban las piezas, los camiones alemanes, franceses y demás países de la Unión Europea no llegaban para cargarla y exportarla.

Así lo contaron ayer los responsables de fruta de hueso de la Región en Cieza, el municipio español que más melocotón y nectarina produce, con más de 200 millones de kilos. Comparecieron en rueda de prensa el presidente de Fecoam, Santiago Martínez, junto a sus responsables del área de fruta de hueso, Pascual Hortelano y Juan Pedro Martínez. Les acompañó el presidente de Coag en la Vega Alta, Manuel Martínez.

Márgenes del 800%

Además de calificar la campaña de «ruinosa» y aseverar que este año, por regla general, no han obtenido beneficios, los representantes de los agricultores han solicitado de manera urgente al Gobierno central que se establezca, por ley, «un margen comercial para que la diferencia de precio que la fruta tiene en el árbol y con el que llega finalmente al consumidor no llegue al 800 por cien de diferencia, como ha ocurrido este año en algunas ocasiones».

Reclamaron también a las administraciones que organicen campañas publicitarias para fomentar el consumo de fruta y que regulen o limiten las nuevas plantaciones para que éstas sean puestas en marcha por profesionales del sector y no por especuladores.

Además, solicitaron la condonación de las cotas de la Seguridad Social, ya que la mitad de la mano de obra contratada no se ha amortizado; la reducción en el pago de los módulos, ayudas y moratorias para préstamos y la modificación de los pagos del SAECA (Sociedad Anónima Estatal de Caución Agraria), la empresa pública que se encarga de los avales y las fianzas para facilitar el acceso a la financiación al conjunto del sector primario.

También hubo autocrítica. Santiago Martínez subrayó que no estamos ante «un exceso de producción, si no ante una aglutinación de producción. Somos los propios cosecheros los que tenemos que procurar que la campaña no dure un mes y medio, como este año, si no seis meses».

Escasez de recursos

De cara al futuro más inmediato, la mayor preocupación del sector es la escasez de agua proveniente del Trasvase. «En el triángulo de Cieza, Jumilla y Fortuna se producen 260 millones de kilos de melocotón, de los que 200 salen de las tierras ciezanas», dijo Martínez, quien advirtió que «la situación es muy complicada sobre todo de Molina de Segura hacia arriba, donde no llegan las desaladoras y solo dependemos del Tajo». «Nos encontramos ante un futuro verdaderamente aciago».