La solución para evitar que lleguen nitratos al Mar Menor a través del acuífero Cuaternario en la zona del Campo de Cartagena es extraer más agua. Esa es la principal propuesta realizada ayer por el hidrogeólogo del Instituto Geológico y Minero de España (IGME) y asesor del Comité Científico del Mar Menor, José Luis García Aróstegui, quien también apostó por colocar sistemas de drenaje y bombeo paralelos a la costa para frenar la llegada de agua con nitratos a la laguna.

García Aróstegui mantuvo una reunión con los integrantes de la Cátedra de Agricultura Sostenible, compuesta por la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT), asociaciones agrarias y comunidades de regantes.

El experto en contaminación de aguas ha apostado por interceptar el flujo subterráneo con una importante carga de nitratos y otros contaminantes que se descarga hacia el Mar Menor, si bien ha advertido que los resultados de los esfuerzos que se están haciendo para reducir la elevada llegada de estos componentes a la laguna se observarían a medio y largo plazo.

García Aróstegui, sin embargo, se ha mostrado esperanzado en lograr reducir la llegada subterránea de contaminantes a la laguna en un menor plazo de tiempo, para lo cual ha considerado clave el cuantificar a lo largo del litoral de la laguna la descarga no superficial. Esta cantidad, ha aclarado el investigador del IGME, habrá de reducirse hasta valores razonables que eviten problemas de intrusión marina además de ser compatibles con los requerimientos y el papel que ejercen los humedales costeros.

Asimismo, García Aróstegui ha mantenido que durante el año hidrológico 2015-2016, los caudales de descarga a cauces o drenajes agrícolas fueron muy reducidos y prácticamente inexistentes desde el acuífero a la rambla del Albujón, debido a que los niveles del agua subterránea estaban a unas profundidades que no intersectaban con la topografía ni red de drenaje.