El PSOE no era propietario hasta hace tres años de ninguna de las 62 sedes que tiene en la Región. Así lo confirma el propio partido en el informe de gestión que la Comisión Ejecutiva Regional saliente presentará ante el XV Congreso que los socialistas murcianos celebran el primer fin de semana de octubre.

El PSOE de la Región atiende así una de las reclamaciones que, año tras año, le realizaba el Tribunal de Cuentas en sus informes de fiscalización. No contar en los registros contables con ninguna de estas sedes suponía «una situación que era necesario, ineludible y urgente de corregir» y en la que se puso en marcha el equipo de Rafael González Tovar desde su llegada a Princesa en 2012. No obstante, solo se ha logrado regularizar 27 de las 62, por lo que todavía queda por hacer en este proceso de regularización, que tendrá que afrontar la próxima Ejecutiva regional que salga del próximo congreso autonómico.

Por otra parte, el informe de gestión da cuenta de los problemas económicos a los que ha tenido que hacer frente la actual dirección, derivados de la caída de ingresos provocada por la pérdida de representación municipal y autonómica tras las elecciones de 2011, que supusieron un auténtico desastre para los socialistas en la Región. Llegó un momento, en 2013, en el que ni siquiera se podían abordar «los gastos mínimos de estructura, de personal y mantenimiento de la sede», afirma el informe de gestión, que destaca la importante deuda que había con proveedores. No obstante, desde 2015, la situación ha mejorado, creciendo los ingresos por aportaciones de cargos públicos en un 147,2%. De esta forma, el PSOE presume de que ya no existe la deuda a proveedores y el partido se ha puesto al corriente de pagos tanto con Hacienda como con la Seguridad Social, dice el informe.

El documento, que deberán votar los delegados del Congreso regional, repasa la actuación de la Ejecutiva liderada por Tovar estos años, destacando el trabajo realizado contra la corrupción («tras muchos años de denuncias por parte del PSOE ante los juzgados, hemos visto los frutos a través de causas que salen a la luz, que finalmente han derivado en una crisis institucional») y la presentación de la moción de censura «que provocó la dimisión del presidente Pedro Antonio Sánchez».

El informe realiza un balance de la actuación de la Comisión de Ética, que solo ha atendido cuatro reclamaciones en estos últimos años, «muchas resueltas porque los compañeros se dieron de baja o porque correspondía al federal su resolución».