Los casos de violencia de género constituyen al menos el 50 por ciento de los casos que atienden los Puntos de Encuentro Familiar (PEF), que se encuentran "desbordados y con largas listas de espera, a veces de hasta seis meses".

Lo asegura la Memoria de la Fiscalía General del Estado correspondiente a 2016, donde considera que "sería deseable que este servicio esté atendido por profesionales con mayor especialización pues los menores víctimas de esa situación se encuentran con frecuencia traumatizados o mediatizados y la relación con el progenitor no custodio no es fácil".

También pide "un esfuerzo de las diferentes administraciones implicadas para dinamizar este recurso tan beneficioso para los menores".

La Fiscalía ha recordado que los PEF no nacieron para atender las situaciones provocadas por la violencia de género, sino "para situaciones de mera conflictividad familiar".

No obstante, ha recalcado que cuando se ha impuesto una medida de alejamiento por violencia de género y existen hijos menores que tienen un régimen de visitas con el progenitor investigado, éstas normalmente se tienen que realizar a través del PEF.

En su informe, la Fiscalía ha alabado la iniciativa de Murcia de crear un Punto de Encuentro Familiar solo para violencia de género, que presta un servicio inmediato y especializado, y cuya buena labor ha llevado a crear otro en Lorca.