Aún habrá que esperar y, desde luego, no se llega a tiempo para el calor de los primeros días de la vuelta a clase. La Subdirección General de Industria está realizando las auditorías a 30 centros de educación secundaria (IES), que comenzaron el pasado mes de julio, con el objetivo de llevar a cabo un análisis y mejorar su eficiencia energética y así poder adaptarlos para que sean más sostenibles.

De las conclusiones de las auditorías «se derivarán una serie de actuaciones que tendrá que realizar la Consejería de Educación», explicaron fuentes del departamento que dirige Adela Martínez-Cachá.

Entre estas actuaciones enumeraron sustituciones de ventanas, mejora de instalaciones eléctricas, cambios de aislamientos, cambios de luminarias, y mejora de sistemas de calefacción y climatización.

Estas auditorías se han venido haciendo tras las continuas protestas de alumnos y docentes por el calor insoportable que se sufre en las aulas y que ha provocado manifestaciones y plantes, sobre todo a raiz de casos de lipotimias y mareos entre los estudiantes.

Sin embargo, desde Educación se recuerda que en los últimos dos años la Consejería ha invertido más de 2,5 millones de euros de fondos propios en mejorar las infraestructuras de los centros educativos, relativas a la eficiencia energética, climatización, cambios de carpintería metálica y de madera y cambios de cubiertas, entre otras.

Además, indicaron que el Gobierno Regional invertirá trece millones de euros procedentes de Fondos europeos FEDER para mejoras de eficiencia energética y climatización, «dentro de los cuales se encuentran las auditorías que se están desarrollando».

Trabajo con Ayuntamientos

En el mismo sentido, desde Educación recordaron que los técnicos de la Consejería «han trabajado durante los meses de verano con los Ayuntamientos de manera coordinada para impulsar actuaciones conjuntas relacionadas con mejoras instalaciones eléctricas para posterior instalación de climatización en los centros que sea necesario, así como las sombras en los patios» -bajo la denonimación de operación sombraje- de los colegios.

Durante este verano, se han acometido actuaciones relativas a mejorar las instalaciones y espacios en materia de temperatura, sombra y mejoras en la climatización por un valor de más de 450.000 euros, concluyen fuentes de Educación.