Personas mayores y no tan mayores que se sienten solas, niños jugando con el teléfono, usuarios que no se llevan bien con las aplicaciones de mapas de su dispositivo móvil e incluso aquellos que han perdido algún número de la agenda. Los operadores del Centro de Coordinación del 112 en la Región no solo reciben llamadas relacionadas con emergencias, según explicó el director general de Seguridad Ciudadana, José Ramón Carrasco.

Según confirmó, se reciben llamadas no urgentes, más allá de las bromas de mal gusto que llegan alertando de incendios, robos y accidentes que en realidad no han existido -cabe recordar que los autores de estos hechos pueden ser sancionados con cuantiosas multas e incluso penas de prisión si se moviliza a las fuerzas de seguridad o los bomberos y finalmente resulta ser una falsa alarma-.

Carrasco explicó que algunos de estos asuntos que llegan al Centro de Coordinación de Emergencias están relacionados con peticiones de información y, por tipología, se incluyen en el capítulo de 'Servicios'.

«Hemos recibido llamadas de ciudadanos que quieren saber dónde hay una farmacia cerca del lugar en el que se encuentran. Incluso han llamado solicitando el número de su compañía de seguros porque han tenido un problema con el coche y no lo tienen a mano», indicó Carrasco.

Según fuentes del 112, también descuelgan el teléfono personas que necesitan hablar con alguien y han descolgado el teléfono para dirigirse a Emergencias y pedirle a los operadores el número del Teléfono de la Esperanza.

«Hay quienes se han perdido y no saben dónde están. Entonces llaman al 112 para tratar de orientarse», explicaron desde el 112.

La coordinación de los diferentes departamentos es crucial para dar respuesta a las llamadas de emergencia de los usuarios y tratar de resolver las otras llamadas relacionas con 'pequeñas emergencias' no tan urgentes.