Luchar contra el fraude que existe en los apartamentos turísticos. Ese es el objetivo del Gobierno de la Región, que este año aplicará más mano dura para detectar si en esta comunidad (especialmente en zonas de costa) están proliferando pisos 'sin papeles', una práctica que se viene dando en todo el territorio nacional con la llegada del verano

La Consejería de Turismo, Cultura y medio Ambiente está acometiendo durante los meses de julio y agosto una campaña especial de inspección para la detección y regularización de la oferta 'clandestina' de alojamientos vacacionales, informaron fuentes del Gobierno regional.

Se trata de un plan de inspección especial que se llevará a cabo en plena temporada alta, momento del año en el que resulta más eficaz este tipo de actuaciones debido a los picos de ocupación y a la proliferación de anuncios en Internet. El dispositivo prevé la realización de 60 visitas de inspección, añadieron las citadas fuentes.

De esta manera, las visitas de inspección se realizarán sobre viviendas que están destinándose al tráfico turístico, tanto por particulares como por empresas comercializadoras que utilizan los canales de oferta turísticos.

En ambos casos, si son irregulares se enfrentarán a sanciones por la comisión de infracciones graves que oscilan entre los 1.001 y los 10.0000 euros.

La Consejería de Turismo estima que, durante esta campaña, sólo durante el mes de agosto se alcanzará un 36% del objetivo anual marcado por el Instituto de Turismo de inspección y regularización.

Tras las modificaciones introducidas en la Ley de Arrendamientos Urbanos, deberán clasificarse conforme al Decreto regional que regula los Apartamentos Turísticos y Alojamientos Vacacionales todas aquellas viviendas en las que se ceda temporalmente el uso de la totalidad de la vivienda, amueblada y equipada en condiciones de uso inmediato, comercializada o promocionada en canales de oferta turística y realizada con finalidad lucrativa.

Turismo sigue estrechando así el cerco en 2017 a las viviendas clandestinas de uso turístico, una modalidad vacacional ante el auge de propietarios que optaron por alquilar sus segundas residencias con el fin de obtener ingresos extra no declarados.

Para llevar a cabo dicha regulación, la Consejería de Turismo, Cultura y Medio Ambiente ha puesto en marcha tres líneas de trabajo durante el año 2017. Desde hace unos meses, el Instituto de Turismo está trabajando en una modificación de la Ley de Turismo de la Región con fin de incentivar la modernización de zonas maduras primando al hotelero en la renovación de sus activos. La modificación busca recoger la figura del condominio.

Asimismo, se ha creado un catálogo de suelo regional susceptible de albergar alojamientos hoteleros, con el objetivo de captar inversores interesados en su construcción y gestión. Se está trabajando asimismo en un desarrollo normativo que facilite el proceso de clasificación turística de los establecimientos, así como la digitalización de todos los pasos, lo que contribuirá a la regularización del mayor número posible de oferta sumergida, explicaron las citadas fuentes oficiales.