Las medidas de protección aplicadas al Mar Menor durante el último año han mejorado la situación de las aguas, aunque el calor puede provocar un empeoramiento del estado de la laguna, según reconocía el portavoz del comité científico encargado de supervisar la evolución de las aguas, Ángel Pérez Ruzafa. Seis nuevos miembros se han incorporado a este órgano consultivo de la Comunidad Autónoma, entre los que hay expertos de la Demarcación de Costas del Estado y la Universidad Politécnica de Valencia o la de Cantabria, según informó la Consejería de Turismo, Cultura y Medio Ambiente.

Pérez Ruzafa reconocía ayer que el equilibrio del Mar Menor es inestable, por lo que está expuesto especialmente a los problemas que puede originar el calor, dado que con la subida de las temperaturas aumenta también el consumo de oxígeno por parte de los organismos que lo habitan.

«El Mar Menor está recuperándose, está recuperando su integridad ecológica, tal y como se observa en numerosos parámetros, como la calidad del agua, los niveles de clorofila, que se mantienen muy bajos, al igual que el fósforo; también los nitratos están bajando desde hace unos meses, pero este equilibrio es muy delicado y cualquier desvío de las medidas que se están tomando para reducir la entrada de nutrientes, cualquier accidente e incluso un cambio climático podría hacer que vaya hacia atrás en su recuperación».

No obstante, confía en que la mejoría en el estado de las aguas también dará a la laguna más capacidad para «amortiguar» los efectos de las posibles fluctuaciones. Sin embargo, reconoció que las elevadas temperaturas que están registrándose este verano, «hacen que los organismos demanden más oxígeno, con lo que cual podría producirse algún tipo de crisis en un momento determinado, si la situación fuese extrema».

Por su parte, el consejero de Medio Ambiente, Javier Celdrán, que presidió la reunión del comité, indicó que «hay síntomas claros de recuperación en cuanto al funcionamiento biológico y de las comunidades bentónicas del Mar Menor, es decir, el conjunto de organismos que pueblan el fondo marino. Es cierto que los estudios marcan que el Mar Menor continúa recuperando su integridad ecológica, pero tenemos que seguir siendo cautos, estar muy vigilantes y continuar trabajando para su recuperación total entre todos».

En la reunión se avanzó en la elaboración de un plan director de investigación que indique dónde deben centrarse los estudios en los próximos tres años, con una inversión de 7,4 millones. Hasta 2020 se invertirán más de nueve millones. En la actualidad se están ejecutando 1,7 millones en 16 investigaciones que son la base para contar con el conocimiento científico necesario para la recuperación total de este espacio natural y hacerlo compatible con la actividad de los distintos sectores productivos.

Asimismo, en la reunión se informó de que el número de integrantes del comité científico ha aumentado a 44, con seis nuevas incorporaciones, que se consideraron necesarias en anteriores encuentros de trabajo. El comité contará a partir de ahora con un catedrático en Producción Vegetal de la Universidad Politécnica de Cartagena, un profesor de la Universidad de Murcia especialista en climatología, geografía y geomorfología y un científico del Centro de Edafología y Bilogía Aplicada del Segura (Cebas-CSIC), experto en gestión del fertirriego.

Además, se unen importantes expertos españoles en gestión de infraestructuras costeras, para lo cual se ha incorporado un catedrático de la Universidad Politécnica de Valencia y otro de la Universidad de Cantabria. También se ha invitado a formar parte del comité al jefe de la Demarcación de Costas del Ministerio. El equipo de expertos que supervisa las tareas de recuperación del Mar Menor y los proyectos en marcha está compuesto por representantes de la Comunidad Autónoma, CHS, la Politécnica de Cartagena, UCAM, Universidad de Murcia, de Alicante, de Valencia y de Cantabria, Instituto Murciano de Investigación y Desarrollo Agrario y Alimentario (IMIDA), Instituto Geológico y Minero de España, Instituto Español de Oceanografía y Cebas.