La Sociedad de Gestión de Activos procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb) heredó gran parte de las viviendas e inmuebles financiados por las cajas de ahorros desaparecidas, que fueron embargados cuando llegó la crisis económica. Desde su constitución esta entidad ha tratado de dar salida a los activos que asumió, pero las dificultades para encontrar comprador le han llevado a optar por el alquiler con el fin de sacarlas al mercado y evitar el deterioro que sufren los inmuebles que permanecen cerrados. En el caso de los hoteles el perjuicio aún sería mayor, dado que la reapertura resulta más costosa a medida que va pasando el tiempo. Entre las propiedades que Sareb ha recibido en la Región figuran dos hoteles de cinco estrellas. Además del establecimiento de Hacienda del Álamo, la entidad asumió otro de la promotora Polaris, situado en una urbanización de Balsicas, que pasó a la sociedad constituida por los bancos acreedores (IRM) y que ha seguido en funcionamiento.