Una niña que resultó herida cuando jugaba en el castillo hinchable de Bob Esponja, que había sido instalado con motivo de una fiesta de Primera Comunión, no será indemnizada al no haberse aclarado las circunstancias en las que se produjo el accidente.

Así se recoge en una sentencia dictada por la Audiencia Provincial de Murcia que rechaza el recurso que la madre de la menor presentó contra la dictada por un Juzgado de Primera Instancia, que desestimó su demanda.

Según la madre de la niña, el percance se produjo cuando esta jugaba en la citada atracción, que había sido contratada por los padres de un niño con motivo de su Primera Comunión, y cayó sobre ella otro participante en la fiesta.

Para la demandante, los responsables de lo ocurrido eran tanto el propietario del castillo hinchable como su compañía aseguradora, a la que igualmente demandó en solicitud de una indemnización por las lesiones que sufrió su hija.

La Sala de la Audiencia, que tiene como ponente a su presidente, el magistrado Miguel Ángel Larrosa, dice que la versión dada en la demanda, según la cual, el accidente se produjo al caer sobre la niña otra persona, "no es inverosímil ni descabellada".

Pero añade de inmediato que "tampoco hay duda de que pueden existir otras versiones igualmente posibles, desde la propia caída de la niña sin la intervención de otra persona, sea menor o mayor de edad, a la producción del siniestro en otro lugar diferente".

"Ciertamente -añade-, todo son conjeturas, como también lo es la versión de la demandante, al no estar apoyada en pruebas que la refrenden".

La sentencia confirma en su integridad la resolución desestimatoria del Juzgado porque la madre no ha demostrado, a lo que estaba obligada, cómo se produjo el suceso, por lo que no cabe derivar responsabilidad indemnizatoria alguna hacia los demandados.

El tribunal de la Audiencia concluye su resolución con la imposición de las costas a la apelante.