La primavera, desde el punto de de las precipitaciones, se considera «normal», alcanzando, de media en la Región, 76 l/m2, lo que le sitúa en el 85% de la mediana (ésta se sitúa en los 91 l/m2). Tres fueron los episodios con tormentas más importantes del trimestre, según los registros de la delegación territorial de la Aemet en la Región: mediados de marzo, finales de abril y el 30 de mayo (muy localizado éste en Los Rollos, Caravaca, donde cayeron 10 l/m2 en 10 minutos).

En total en marzo, se recogieron 54 l/m2, por lo que se le considera un mes muy húmedo (casi tres veces los valores habituales para este mes en la Región); abril, con 20 l/m2, fue normal; y mayo, con tan solo 2 l/m2, fue muy seco. De hecho, ese mes ha sido el mayo más seco desde 1941.

Durante este trimestre se acumularon precipitaciones superiores a 100 l/m2 en zonas de las comarcas del Noroeste, Altiplano y Vega alta del Segura, y la máxima precipitación acumulada, 151 l/m2, tuvo lugar en Benizar, Moratalla. Donde menos precipitación se acumuló fue en el Campo de Cartagena, unos 30 l/m2.

El delegado territorial de la Aemet explicó que los principales episodios de precipitación estuvieron acompañados por actividad tormentosa. Así, se registraron precipitaciones en forma de nieve los días 3, 4, 23 y 24 de marzo por encima de los 1.000 metros y el día 13 de marzo por encima de los 800 metros.

La precipitación estuvo puntualmente acompañada de granizo los días 3 y 12 de marzo y el día 29 de mayo, y fue en forma de ba rro los días 4 de marzo y 5 de abril.

Por último, por lo que se refiere al año hidrológico transcurrido (del 1 de octubre al 20 de junio), las lluvias ascienden a 398 l/m2, (un165 % del valor normal para el mismo periodo) y le otorgan un carácter pluviométrico muy húmedo. Sin embargo, Palenzuela dejó claro que si eliminamos de la estadística los episodios de lluvia de diciembre pasado, «el año hidrológico es seco». De hecho el 40% del total de lluvias recogidas se produjeron entre el 15 y 19 de diciembre.