La titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 7 de San Javier (Murcia) ha apreciado indicios de un delito de acoso laboral contra un profesor de la Universidad de Murcia (UMU), por lo que ha admitido a trámite su querella y ha acordado la incoación de diligencias previas, entre ellas la declaración del denunciante hoy 12 de mayo.

Francisco Ruiz Juan, de 55 años, que es desde 2006 profesor titular de la Facultad de Ciencias del Deporte, se ha querellado contra el decano, Arturo Díaz Suárez, y los dos últimos secretarios del Departamento de Actividad Física y Deporte, Alfonso Valera y Ernesto de la Cruz, informa El Mundo.

Según denuncia el docente, desde hace más de cinco años está siendo sometido a una intencionada «persecución sistemática» que ha menoscabado gravemente su integridad moral y le ha provocado ya una enfermedad «física y psíquica», que le ha llevado incluso a la baja laboral durante varios meses.

En su querella, detalla más de una treintena de actos «hostiles o humillantes» que dice haber sufrido, aunque apunta que «hay muchos más, que se añadirán a la causa pronto».

Entre ellos se refiere a amenazas por escrito del decano; la apertura de un expediente disciplinario en base a «documentación falsa e intencionadamente sesgada», que según dice le causó un grave daño moral y profesional pero que nunca se resolvió y concluyó por caducidad; el retraso, denegación o falta de respuesta sistemática ante la petición de permisos de todo tipo; hasta la denegación de material, como folios; e incluso asegura que ni siquiera obtuvo respuesta cuando pidió un día para acudir al funeral de su suegra.

Aunque la mayoría de situaciones de acoso que relata se producen a partir de 2012, el profesor explica en la querella que todo empezó en 2009, cuando descubrió que alguien estaba accediendo a su correo electrónico de la Universidad sin su autorización. Tras denunciar internamente los hechos, la Secretaría General de la Facultad le respondió que otro profesor, era quien había accedido a sus mensajes, aunque aseguró que con permiso del propio Ruiz, que le habría facilitado la clave, «algo que no es cierto», afirma.

Manifiesta que intentó evitar una controversia mayor, y que se esclareciera por la vía interna universitaria. Pero ante el «silencio oficial», finalmente presentó una denuncia en los juzgados, que fue «sobreseída por prescripción».

Francisco Ruiz llegó a la UMU en 2006 tras ejercer como profesor en la Universidad de Almería desde 1999. A pesar de la ilusión, pronto advirtió que en la institución académica «predominaba el amiguismo» y «cuando no entré en ese juego, y en especial tras presentar un informe negativo sobre la tesis doctoral de uno de los 'amigos', comenzó la cacería», argumenta.

Esta redacción intentó ayer hablar con el decano de la facultad sin conseguirlo hasta la hora de cerrar la edición.