La Consejería de Agua, Agricultura, Ganadería y Pesca estudia incorporar el uso de vehículos aéreos no tripulados para los controles de campo de la Política Agraria Comunitaria (PAC), pues considera que estos equipos pueden repercutir en una mayor eficiencia y eficacia de los mismos, reduciendo su complejidad y sus costes. La tecnología a emplear en el proceso debe ser capaz de identificar parcelas y cultivos, así como el estado de estos.

La directora general de Fondos Agrarios, Carmen García Frago, asistió ayer a una demostración técnica sobre el terreno de las prestaciones que se pueden obtener mediante el vuelo de drones. Así, se pudo comprobar que la técnica de la fotografía esférica, tomada a unos 100 metros de altura, permite obtener información de campo de unas 100 hectáreas en 30 minutos, con lo que es posible comprobar, con la ayuda de una ortofotograría reciente, los tipos de cultivo, la precisión del parcelario utilizado y el estado de dichos cultivos. Otra utilidad mostrada es la medición con precisión de una parcela de cinco hectáreas en un vuelo programado de cinco minutos.

También se tomaron imágenes mediante cámaras multiespectrales e infrarrojas, a través de las cuales se consiguen captar matices que el ojo humano no es capaz de ver, y con las que se pueden hacer diagnósticos de los cultivos: determinar su vigor, la gestión hídrica y generar un mapa de fertilización, así como detectar enfermedades; aunque la función más interesante en los controles de la PAC sería la de obtener datos sobre la vegetación existente en un momento dado (greening).

El uso de los drones está sujeto a la Ley 18/2014 desde el pasado año pasado, que permite su utilización en zonas no pobladas.

El Instituto Murciano de Investigación y Desarrollo Agrario y Alimentario (IMIDA), ya utiliza este tipo de drones para para seguir el estado de las cosechas, detectar plagas y estudiar la fauna silvestre sin causarle molestias. Los drones se compraron gracias a la financiación del 80% de los fondos europeos FEDER. Por su parte, la Dirección General de Desarrollo Rural y Forestal tambiuén usa drones para conocer la evolución de las plagas de perforadores y procesionaria de los pinos en los montes públicos.