Cuatro autonomías -Cantabria, Canarias, Comunidad Valenciana y Murcia- han superado en febrero pasado el periodo máximo de pago a proveedores, legalmente establecido en 30 días, e incluso la comunidad murciana duplica esa cifra y tarda 69,14 días en satisfacer las deudas con sus suministradores.

Según ha informado hoy el Ministerio de Hacienda, el periodo medio de pago fue en febrero de 26,01 días, ligeramente superior a los 25,45 de enero pasado (un aumento del 2,20 %), aunque sigue por debajo del máximo marcado en la normativa sobre morosidad, de 30 días.

Hacienda atribuye el incremento a la subida de 9,59 días en la ratio de las operaciones pagadas, compensada por la disminución de 5,67 días en la ratio de operaciones pendientes de pago.

Detalla que la ratio media de las operaciones pagadas ha sido de 26,48 días, en tanto que el índice de operaciones pendientes de pago se ha situado en 25,66 días.

El departamento que dirige Cristóbal Montoro distingue entre aquellas comunidades que han superado el plazo máximo legal de 30 días previsto en la normativa sobre morosidad -las cuatro citadas- de aquellas otras que superan el plazo máximo de 60 días previsto en la ley de estabilidad, que actualmente sólo supera Murcia.

Para este caso, y tras mantenerse dicha situación en los plazos previstos, el Ministerio de Hacienda y Función Pública comienza a

aplicar los efectos y medidas contempladas en la normativa de referencia.

De hecho, Murcia ya recibió un aviso el pasado mes de febrero para que disminuyera lo que tarda en pagar a sus proveedores, ante el riesgo de que Hacienda retraiga recursos para abonarlos directamente.

Respecto a enero, destacan Baleares y Cataluña como las comunidades que han conseguido reducir su promedio por debajo de los 30 días.

También se han difundido hoy los datos de deuda comercial y deuda no financiera de las comunidades.

A finales del mes de febrero, la deuda comercial de las autonomías asciende a 6.016,77 millones de euros, equivalente al 0,52 % del PIB nacional.

El 93,02 % de esa deuda comercial se concentra en operaciones corrientes con un importe de 5.596,50 millones de euros, mientras que el 6,98 % restante, equivalente a 420,27 millones de euros, corresponde a operaciones de capital.

Durante el mes de febrero, la deuda comercial ha disminuido en 106,56 millones de euros, lo que supone una bajada del 1,74 % en comparación con el mes anterior.