Comisiones Obreras (CC OO) pone hoy fin a dos años «duros y complicados» en los que la división interna del sindicato entorpeció la labor de la organización. Así lo reconoció Carlos Bravo, presidente de la comisión gestora que ha dirigido el sindicato durante los dos últimos años, en la primera jornada del undécimo congreso regional de CC OO que debe elegir hoy un nuevo comité ejecutivo y una secretaría general.
Una cita que ha vuelto a reunir a un centenar de delegados de las federaciones de actividad del sindicato para elegir quién será el que guíe ahora a la organización, una vez superada una etapa «convulsa», como señaló el único candidato a la secretaría general, Santiago Navarro.
Ambos hablaron antes del inicio del congreso, que se desarrolla entre ayer y hoy en la sede sindical de Cartagena, donde se ha expuesto la situación de la organización y los retos que debe asumir a corto plazo, como la puesta en marcha de la estrategia de empleo firmada en diciembre junto al Gobierno regional y a la Croem.
A juicio de Bravo, «el sindicato va a salir fortalecido» del congreso, y añadió que «en los dos últimos años se ha trabajado muy duro con todas las organizaciones en Murcia para recomponer la unidad y ahora es un hecho». De hecho, el presidente de la comisión gestora reconoció estar «muy satisfecho por cómo se ha llevado este proceso, con sacrificios y gran generosidad por parte de todos».
Bravo señaló que el conflicto interno del sindicato, unido a «una situación económica muy difícil», ha obligado a «adoptar decisiones de ajustar la capacidad del sindicato a sus recursos y eso ha llevado a situaciones de dureza, pero también de responsabilidad con los afiliados y los trabajadores».
Hoy, sobre las 12.30 horas se conocerá el resultado de las votaciones, aunque todo apunta a que será la candidatura de Navarro la que consiga el respaldo unánime o, al menos, mayoritario de los representantes de las federaciones de actividad. Bravo destacó de esta lista que está compuesta «por gente joven, en su mayoría mujeres, que combinan experiencia, renovación y juventud».
Bandos enfrentados
Así, se debe cerrar una etapa con dos bandos enfrentados que obligó a dimitir al último secretario general, Daniel Bueno, e hizo ingobernable la Unión Regional de CC OO. La división interna llegó a provocar incluso la anulación del congreso celebrado en septiembre de 2015, en el que fue elegido secretario general Ángel Soler con dos votos de ventaja, tras las impugnaciones presentadas.
