Los inspectores de la Consejería de Desarrollo Económico, Turismo y Empleo consiguieron el pasado año la regularización de 1.213 alojamientos dedicados al alquiler turístico en la Región. Esta cifra ha superado las previsiones de este Departamento, que estaban establecidas inicialmente en el afloramiento de un millar de apartamentos y otro tipo de establecimientos no declarados.

Fuentes de Turismo precisaron que en este momento están siendo utilizados como alojamientos turísticos desde habitaciones alquiladas en viviendas particulares y viviendas vacías hasta bloques de apartamentos que no han encontrado salida en el mercado inmobiliario después de la crisis del ladrillo.

Según informaron fuentes de la Consejería, en 2016, y dentro del marco del Plan Estratégico de Turismo 2015-2019, se realizaron 269 visitas de inspección para la detección de oferta clandestina.

Esta cifra incluye 223 a apartamentos y alojamientos vacacionales y 34 visitas a áreas de autocaravanas y a zonas naturales susceptibles de acampada salvaje o descontrolada, entre otras.

Como resultado de estas visitas, 1.213 establecimientos han realizado los trámites para conseguir la clasificación turística. Esta cifra representa el 121% del objetivo anual que preveía la regularización de 1.000 alojamientos de diferentes tipos.

Para el año 2017 la Consejería tiene previsto el control y seguimiento de 150 de empresas y particulares susceptibles de estar dedicadas al alojamiento turístico.

La previsión es conseguir la regularización de unos 750 alojamientos. La campaña de este año estará centrada principalmente en viviendas vacacionales. El foco se va a poner en nuevas actuaciones de detección de clandestinos y en la clasificación de los alojamientos que presentaron declaración responsable a raíz de las detecciones del año pasado.

El consejero de Turismo, Juan Hernández, explicaba hace unos meses que los inspectores de la Consejería «se están metiendo en las páginas que ofrecen alquileres de apartamentos a través de Internet y llaman a los propietarios. Así consiguen pistas para saber si están legalizados o no. Además, lo ponen muy fácil, porque lo tienen ahí expuesto. Internet, para lo bueno y para lo malo, es el gran ojo que nos vigila a todos».

Recordaba que el objetivo de todo el año 2016 era conseguir la regularización de un millar de viviendas turísticas no declaradas pero en los seis primeros meses había ya 680 expedientes iniciados. Pero tenemos identificadas más de 1.800».

Juan Hernández asegura que no es posible saber cuántos apartamentos y alojamientos turísticos de todo tipo pueden estar alquilándose en la Región, aunque señaló que «teniendo en cuenta que hay 700.000 viviendas y somos un millón y medio de habitantes, está claro que hay muchas viviendas turísticas», indicó.

Sin embargo, la Consejería de Turismo no es la única institución persigue el fraude en los alquileres turísticos. También la Agencia Tributaria estatal incluye este tipo de arrendamientos en sus campañas de inspección. Según el último balance de la actuación inspectora de Hacienda, en el año 2016 se realizaron 149 visitas en el marco del plan de control de alquileres no declarados.

Además, los inspectores de Hacienda rastrean los portales en los que se ofrecen apartamentos de alquiler y después visitan parte de ellos para comprobar si están ocupados, aunque se encuentran graves dificultades para constatar si los usuarios son inquilinos.