Si no son más, tampoco son muchos menos. La participación en las distintas movilizaciones convocadas en defensa de la enseñanza pública en la Región en las últimas semanas, sigue contando con una alta participación, que ayer se volvió a ver por el centro de Murcia, tras la celebración de una huelga parcial y la posterior manifestación. Unos cinco mil docentes y estudiantes llenaron las calles, llegados desde distintos puntos de la Región.

De nuevo, en el centro de la diana está la orden de los conciertos educativos para el período 2017/2018 y 2022/2023, que el lunes pasó el último trámite antes de que entre en vigor tras ser publicada en el Boletin Regional: Por 11 votos a favor y 3 en contra de la Comisión Permanente del Consejo Escolar se aprobó esta nueva norma, que amplía los conciertos a seis años y permite la concertación de la enseñanza no obligatorias, como el Bachillerato y la FP.

Apoyados por la Plataforma en Defensa de la Educación Pública-Marea Verde y colectivos como los Yayoflautas, los seis sindicatos que forman la Junta de Personal Docente no Universitario -Anpe, Ugt, CC OO, Sterm, Sidi y Csif-, reinvindicaron que 'La escuela pública no se vende, se defiende'.

A nadie pareció afectarle esta inminente aprobación, y con incesantes cantos, como «Profesores y estudiantes, unidos y adelante», mostraron que el ánimo no decae. Así lo manifestó Alfonso Vera, de UGT: «Queremos pensar que no está todo perdido y seguiremos luchando para que no se aplique; tanto en la calle como, si es necesario, en los tribunales».

Pancartas como 'La libertad de elegir la educación privada ya existe. Lo que quieren es que la pagues tú', resume el mensaje que se lanzó de nuevo ayer.

Desde la Consejería de Educación, que insistieron en que este concierto no perjudica a la enseñanza pública, cifraron en un 12,7 por ciento del alumnado y un 7,8 del profesorado, el seguimiento de la protesta de ayer en los centros educativos.