Usted ha intervenido en el Congreso con una ponencia sobre el almendro y la oportunidad que ofrece a la fruticultura española. ¿En qué sentido?

Ante todo, he querido dejar claro que el cultivo del almendro, tal y como lo concebimos actualmente, va a ser historia. Al amparo de la subida de los precios, que se han triplicado en los últimos años, y previsiblemente se van a mantener, ha habido una revolución del cultivo en nuestro país. Y contamos con todos los elementos para que la almendricultura española sea tremendamente competitiva, al mismo nivel que la americana.

¿Con las mismas variedades, o la revolución también va por la renovación?

Hay que renovar. En este foro hemos presentado una nueva variedad, de floración extratardía, que hemos denominado 'Macaco', que permite producir almendra en zonas muy frías, donde otras se hielan. Ya teníamos una variedad muy buena, la 'Penta', pero los agricultores son muy reacios a poner una sola variedad. Hay que pensar que las fincas de 10-20 hectáreas ya no existen; ahora no tienen menos de 100. Y nadie se la quiere jugar a una sola carta, aunque ésta sea buena.

¿Qué ofrece esta nueva variedad?

Es totalmente complementaria a la 'Penta', es una pareja excelente, y va a permitir que en las fincas se recoja primero ésta y entre una semana y diez días después la 'Macaco'. Dependiendo de la zona, en las zonas cálidas de la Región estaríamos en la primera quincena de agosto y en las frías en la primera semana de septiembre. Es una variedad tan productiva como la que más y tiene la ventaja que escapa a las heladas. En zonas frías no tienen rivales.

Hablemos de rendimientos. ¿Qué ofrece el secano y qué el regadío?

En secano, los rendimientos de cualquier variedad siempre van a ser mucho menores que en regadío. En Murcia, estaríamos hablando de entre 100 y 300 mm. de lluvia al año, y éste ha sido un desastre. Y cuando hablamos de regadío en el mejor de los casos son 5.000 mm de aportación, pero lo normal son 1.000 o 2.000. Esto no es presentable para el almendro, si comparamos con el agua que los americanos le ponen:10.000. Cuanto más se riegue, más kilos da.

¿Y en cuanto a kilos?

La producción depende de muchos factores. Ni una buena variedad garantiza la producción ni un buen cultivo tampoco. Pero si tenemos la tierra adecuada y la variedad adecuada y la cultivamos bien, se puede decir que con 10.000 m3/hectárea y año -que es lo que riegan los americanos- una variedad 'Penta' o 'Macaco' pueden producir entre 2.500 y 3.000 kilos de pepita por hectárea. En secano la media nacional está en 100 kilos y con eso no salen las cuentas; pero suelen ser plantaciones familiares en las que no cuentan las horas que se les dedica. Si hablamos de negocio debemos ir al regadío aunque aquí hablar de 10.000 m3 es una burrada. Con la mitad nos iríamos a 1.500 o 2.000 kilos, que está muy bien.

¿Cuánto han tardado en obtener esta variedad?

En el grupo de mejora genética de frutales llevamos más de 15 años trabajando en esta variedad. Ha sido ensayadas en varias parcelas externas en Albacete, Alicante y Andalucía. Es una variedad que sabemos que es buena. Y la hemos sacado ahora porque el mercado estaba exigiendo una variedad similar a 'Penta' pero que madurara una semana o diez días después y eso lo teníamos. Estamos convencidos de que tendrá el mismo éxito. Faltaba ese nicho de mercado por cubrir.

Por lo que ha visto tras su presentación, ¿tiene buenas perspectivas la salida al mercado?

Nuestro grupo de investigación, del cual estoy muy orgulloso como responsable, ha sido declarado de excelencia en la Región por la Fundación Séneca; además, no sólo tenemos buena ciencia en los baremos internacionales, sino que también somos líderes mundiales en transferencia de conocimiento. Actualmente, entre las variedades de albaricoquero de unos compañeros y las nuestras de almendro, tenemos más de 150 contratos con viveristas nacionales e internacionales que están pagando al CSIC por comercializar nuestras variedades.

Ante ha hablado de precios, ¿podría concretar?

Debido al nuevo sistema de cultivo, con una densidad mucho mayor, en la que se plantan los árboles como si fueran setos, muy juntos, en el segundo o tercer año las producciones son enormes. Aunque nadie sabe lo que va a pasar en un futuro, a fecha de hoy, la gente ya está vendiendo a 6 euros el kilo y está ganando dinero. En zonas de producción tradicional de fruta de hueso ya están cambiando al almendro, porque tiene ventajas como que se puede mecanizar totalmente; se puede almacenar y no se pudre y aguanta más que la americana por tener más dura la cáscara. Su proyección exportadora es enorme.