El consumo de agua en la red que abastece la Mancomunidad de Canales del Taibilla (MCT), tanto en la Región de Murcia como Alicante y algunos pueblos de Albacete, se ha mantenido estable en los tres últimos años, tras un bajón a consecuencia de la crisis. Sin embargo, desde que en octubre empezó el nuevo año hidrológico, este organismo que depende del Ministerio de Agricultura ha constatado un incremento en el consumo de un 4%.

«Esto nos hace pensar que la economía se está reactivando, aunque no podemos decir que todo esté ya superado», manifestó el presidente de la Mancomunidad, Adolfo Gallardo.

A la hora de apuntar las causas concretas, el presidente señaló que «es complicado», dado que muchos ayuntamientos, como el de Murcia, 'juegan' a utilizar aguas propias procedentes de pozos, que compaginan con las que le sirve el Taibilla.

«Sí hemos notado que en Cartagena el gasto ha tenido un incremento importante, que entendemos es por la demanda de la zona industrial del Valle de Escombreras», apuntó Gallardo.

Por lo que se refiere a los consumos finales del año 2015-2016 respecto al ejercicio anterior, aunque se ve un aumento en el consumo global es muy leve. En concreto, los ayuntamientos demandaron casi 850.000 metros cúbicos más (185,1 millones frente a 184,2 millones de metros cúbicos del año anterior).

Por meses, es el periodo mayo-septiembre el que más tira del abastecimiento, coincidiendo con el inicio de la temporada turística en la Región.

En este periodo, el incremento en el consumo se produce en una horquilla entre 2 y 6 hm3 -cuando más, en julio y agosto-. De hecho el Taibilla distribuyó a los ayuntamientos en los meses de mayo 1,5; junio, 17,4; julio, 19, 5; agosto, 19,7 y septiembre, 16,7 en millones de metros cúbicos -o hm3-. El resto del año fluctua entre 12 y 14 hm3.

Con la vista en el cielo

Al igual que los regantes del Sureste, los responsables de la Mancomunidad de Canales del Taibilla están mirando al cielo y esperando a que lleguen las lluvias de primavera que llenen los embalses, sobre todo los de la cabecera del Tajo, Entrepeñas y Buendía.

«La situación es muy mala y todo agua es poca», destacó el presidente.

La Mancomunidad tiene asignados 7,5 hm3 de agua de los trasvases que llegan del Tajo al Segura. «Es una cantidad muy importante, casi la mitad de lo que consumimos en abastecimiento, salvo en verano».

El temor del MCT, que comparte con los regantes, es que las existencias de la cabecera del Tajo disminuyan y se queden por debajo de la línea roja trasvasable, que, a partir de enero, se ha situado en los 368 hm3. «Entonces no recibiremos nada de agua, ni para regar ni para beber, algo que ya ocurrió el año pasado durante un par de meses», recordó Gallardo. «Y eso lo podemos aguantar en los meses de bajo consumo, pero no tanto en plena temporada turística», advirtió.

En la cabecera del Tajo hay almacenados actualmente 436 hm3, 68 hm3 por encima del límite no trasvasable, según los datos de la Confederación Hidrográfica de esa demarcación hidrográfica. En los próximos días debe reunirse la Comisión de Explotación del Trasvase para informar a la ministra de Agricultura de la cantidad que podría autorizarse para el envío de agua correspondiente a febrero.

El río Taibilla aguanta

El presidente de la Mancomunidad comentó que tras las lluvias de los temporales de diciembre y enero, el río Taibilla se había visto beneficiado y éstas habían permitido que tuvieran aportaciones al mismo nivel que en años anteriores.

Por el contrario, la presa había tenido que soltar «algo de agua», debido a la contaminación por trihalometanos, y que provocó el cierre de los grifos en varios municipios de la Región. «Pero tenemos la esperanza de que se vuelva a recuperar», señaló Gallardo.