El Hospital Virgen de la Arrixaca de Murcia es pionero a nivel nacional en el uso de cirugía cardiovascular mínimamente invasiva, lo que le ha llevado a ser elegido por decenas de cirujanos de toda España como el lugar de referencia en el que formarse. El centro de El Palmar ha acogido esta semana a uno de esos grupos de cirujanos cardíacos procedentes de hospitales de Madrid, Barcelona, Valencia y Mallorca, quienes durante dos días han estado asistiendo a sesiones teóricas y prácticas (con 3 operaciones) de forma simultánea para conocer esta técnica de la mano de los mejores, un equipo liderado por el doctor Sergio Cánovas, jefe de servicio de Cirugía Cardiovascular de la Arrixaca, y en el que también ha participado el doctor Pascual Parrilla, jefe de Cirugía General del hospital de referencia de la Región de Murcia.

El curso se realiza con grupos reducidos, de no más de ocho personas, ya que en la práctica tienen que entrar al quirófano, según explica el doctor Cánovas, quien recuerda que este tipo de cirugía mínimamente invasiva se ha utilizado en otras especialidades, «pero en cardiología es relativamente reciente». Una técnica que este especialista desarrolló en Valencia y trajo hasta la Arrixaca, convirtiéndolo en centro pionero y uno de los de mayor experiencia de España.

El jefe del servicio de Cirugía Cardiovascular reconoce que el Hospital de la Arrixaca dispone de un quirófano muy bien dotado para docencia, ya que cuenta con un brazo con cámara que permite que todo lo que ve el cirujano quede grabado y el resto del equipo lo pueda ver en tiempo real en una pantalla de 55 pulgadas que hay en el propio quirófano.

«Al estar dentro, los cirujanos cardiovasculares que acuden al curso no se pierden ningún detalle y pueden preguntar las dudas que van surgiendo en el momento en tiempo real», subraya el doctor Cánovas. Además, se utiliza tecnología 3D para ver la válvula de la que se está interviniendo en ese momento a través de unas gafas especiales. Preguntado por los pacientes que pueden beneficiarse de esta técnica, señala que la cirugía cardiovascular mínimamente invasiva se puede emplear en aquellas personas a las que se les interviene por tener una válvula aórtica enferma, a quienes se les practica una incisión de entre 7 y 8 centímetros a través de la que se lleva a cabo la operación. Otro de los casos es en válvula mitral, donde la incisión que se hace es menor, de entre 5 y 6 centímetros. «Esta válvula están más escondida y en este caso es un verdadero avance el poder usar tecnología 3D, ya que se hace a distancia», afirma.

Lista de espera

En el tiempo que la Arrixaca está ofreciendo este tipo de formación son más de 60 los cirujanos cardiovasculares de toda España que han pasado por él. Incluso hay lista de espera para poder formarse en Murcia en esta técnica mínimamente invasiva de la que el doctor Sergio Cánovas asegura que están planteándose desarrollar próximamente un curso a nivel internacional.