Alrededor de 600 profesionales del transporte regular de viajeros en la Región de Murcia están llamados a la huelga indefinida a partir del próximo jueves 2 de febrero. Los sindicatos han convocado esta medida de protesta por el atasco en las negociaciones del nuevo convenio colectivo en el sector, tras cinco meses de conversaciones que, por el momento, no han llegado a buen puerto.

La huelga se inicia el próximo 2 de febrero y se llevará a cabo cada martes y cada jueves, en horario de 6.30 a 9.30 horas, por la mañana, y de 18.30 a 21.30 horas, por la tarde.Afectará a todos los autobuses urbanos e interurbanos que circulan por la Región, así como al tranvía de la capital murciana, según aseguró a esta Redacción el presidente del comité de empresa de Transportes Urbanos de Cartagena, José Alfonso Conesa, perteneciente al sindicato UGT. Comisiones Obreras (CC OO) y Unión Sindical Obrera (USO) también están detrás de la convocatoria del paro en el transporte público. En el horario de huelga, se habilitarán servicios mínimos.

No obstante, la huelga en el sector del transporte todavía podría evitarse si las dos partes alcanzan un acuerdo el próximo lunes en la reunión que mantendrán en la Oficina de Resolución de Conflictos Laborales (ORCL) de la Región de Murcia.

Según Conesa, los profesionales del transporte de viajeros de la Región llevan más de cinco años sin subida salarial alguna, ya que en la negociación del último convenio se acordaron una serie de recortes que afectaron a los complementos de antigüedad y a los días de vacaciones. Los sindicatos aceptaron esta propuesta debido a la mala situación económica que vivía entonces el país, con gran cantidad de empresas echando la persiana y las cifras de desempleo subiendo como la espuma.

Sin embargo, la mejora de la situación económica que se ha producido en los últimos años no va a suponer una recuperación de ventajas de los trabajadores, según denuncia UGT, que señala que la patronal de las empresas del sector «quiere que los empleados sigan haciendo el esfuerzo, pese a que ya han perdido poder adquisitivo en los últimos años. Según explica José Alfonso Conesa, los principales puntos de disputa entre las dos partes están en la recuperación salarial en base al IPC (no se ponen de acuerdo con qué dato aplicar) y en el cómputo anual de horas, que los sindicatos quieren rebajar.

Además, los sindicatos exigen que en este nuevo convenio colectivo entren los profesionales del tranvía de Murcia. «Es una novedad en las negociaciones de este convenio y no quieren registrar las categorías de los trabajadores de este medio de transporte, como están los demás», indica el delegado de UGT, quien reclama un último esfuerzo para evitar la huelga «porque los grandes perjudicados serán los ciudadanos que cada día hacen uso de las diferentes líneas de autobús urbano e interurbano para su vida diaria».