Iberdrola revisó durante 2016 más de 7.500 kilómetros de sus líneas eléctricas en la Región de Murcia para reforzar la seguridad de suministro y mejorar la calidad del servicio, que se vio reflejado en un 3% con respecto a 2015.

La compañía inspeccionó líneas de muy alta, alta y media tensión de cara a garantizar su fiabilidad y funcionamiento en las mejores condiciones frente a las inclemencias meteorológicas.

De esta manera, Iberdrola revisó a lo largo del pasado ejercicio 4.700 kilómetros de líneas aéreas, así como otros 900 kilómetros de líneas subterráneas. Además, analizó utilizando termografía 1.300 kilómetros y realizó labores de poda y mantenimiento de pasillos eléctricos a lo largo de 600 kilómetros.

Las revisiones de las líneas aéreas están orientadas a detectar posibles anomalías en los elementos que componen este tipo de instalaciones: aisladores, conductores, herrajes o apoyos que pudieron quedar dañados por rayos, arbolado, obras de construcción o edificaciones próximas, entre otras causas.

La compañía registró un máximo histórico de energía suministrada acumulada en el año 2016, en la Región de Murcia, alcanzando los 8.873,41 GWh, lo que representó un aumento del 1% con respecto al año anterior, valor que también representó un máximo histórico en el ejercicio.