«Yo así no puedo seguir toda la mañana, no puedo soportar la peste que echan. Deberías de tener ambientador en el coche para esa gente». Es lo que dijo una examinadora de la Dirección General de Tráfico (DGT) cuando un joven marroquí que se disponía a hacer la prueba para sacarse el carné del coche se subió en su vehículo, según ha denunciado ante la Policía Nacional y la propia Jefatura Provincial de Tráfico otro de los chicos que ese día iba a hacer el examen.

Según relata el denunciante, los hechos ocurrieron poco después del mediodía del pasado martes, día 13, en la avenida General Ortín, ubicada en la Ronda Sur de Murcia. En esa zona habían quedado varios jóvenes para realizar la prueba del carné. En el caso del denunciante, era la quinta vez que se examinaba.

El joven asegura que, nada más ver a la examinadora, le causó «mala impresión», especialmente porque «incumplió una norma de tráfico» al cruzar por en medio de la carretera para dirigirse a un bar, algo incorrecto porque, a juicio del alumno, dado el cargo de la mujer ha de dar ejemplo.

Sin embargo, el conflicto comenzó cuando la examinadora, siempre según la denuncia del chico, vio que uno de los alumnos era marroquí. «Cuando se subió al vehículo, le dijo que se bajara, que las clases se iban a dar de uno en uno», relata el denunciante.

Al salir del coche el africano, la mujer comentó «que las clases las iba a dar de uno en uno, por la peste que echaban».

De hecho, cuando tocó el turno del marroquí para examinarse, la examinadora «bajó la ventanilla de su coche, como que si el chico echase peste», afirma el denunciante. A los poco minutos de comenzar el examen, «el chaval, que estaba nervioso, dio un portazo del coche y se fue», añade.

«Una persona así no debería realizar este trabajo: por ser una infractora y por discriminar a otras personas por su raza y origen», escribe el denunciante en la queja puesta ante la Jefatura de Tráfico.