Los regantes del Trasvase Tajo-Segura se han traído de su reunión de ayer en la sede del ministerio de Agricultura el compromiso de que todo el agua de la desaladora de Torrevieja, que pertenece a Acuamed, se destine a sus socios, una cantidad que en la actualidad asciende a 3,5 hm3 al mes, pero que en «pocos meses» puede duplicarse.
A ello se comprometió el presidente de Acuamed y Secretario de Estado de Medio Ambiente, Pablo Saavedra, durante la reunión que mantuvo con la cúpula del Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura (Scrats), acompañado de la Directora General del Agua, Liana Ardiles, y el presidente de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS), Miguel Ángel Ródenas.
«Los regantes estaban nerviosos porque había rumores de que el agua podía destinarse a otros usos, por lo que era muy importante para nosotros dejar claro quién tiene prioridad sobre esos recursos», explicó el presidente en funciones del Scrats, José Antonio Andújar.
«Con estos recursos podremos paliar algo la falta de agua del Campo de Cartagena, que es la más necesitada del conjunto del Trasvase», añadió, indicando que las obras para ampliar la potencia eléctrica de la planta alicantina y poder con ello duplicar su capacidad de desalación «van muy avanzadas, aunque no van a estar terminadas tan rápido como nos gustaría». La planta podría desalar entonces 80 hm3 al año.
Andújar manifestó que en esta reunión no se ha hablado del precio final que tendrían que abonar por cada metro cúbico. Se había comentado que, debido a la sequía y en el marco del decreto prorrogado en septiembre, el Ministerio podría subvencionarles hasta diciembre de 2017 el agua de la desaladora de Torrevieja, a razón de 0,23 euros el metro cúbico, con lo que el precio final se quedará en 0,30 euros. El precio actual ronda los 50 céntimos.
«Ese tema lo hemos dejado para hablarlo con la ministra cuando nos reunamos con ella en enero», indicó Andújar, que también le planteará a Tejerina los futuros envíos de agua al Trasvases, una vez que comience 2017.
Campo de Cartagena
Por lo que respecta al otro gran asunto, la regularización de los pozos del Campo de Cartagena, los regantes del Trasvase han forzado el compromiso de que las CHS «se ponga las pilas ya» para ir agilizando los trámites, «que hemos denunciado que han estado muy paralizados estas últimas semanas».
«Todo es poco para la necesidad de agua que tiene esta zona», subrayó el presidente del Scrats, añadiendo que, en general, pueden calificar de «muy positiva» la reunión de ayer: «Nos han demostrado que se preocupan por los intereses de los regantes, aunque no todo vaya tan rápido como nos gustaría».
Sin embargo, el nerviosismo de los agricultores del Campo de Cartagena por la paralización de las autorizaciones se ha traducido en la convocatoria de una manifestación para el 10 de enero.
