El objetivo es mejorar la seguridad de las carreretas. Por ello, la Dirección General de Carreteras estudia aplicar nuevas medidas de control de la calidad en las carreteras construidas con un sistema de colaboración público-privada para así poder aumentar la seguridad de los conductores que circulan a diario por ellas, según indicaron ayer fuentes regionales en un comunicado.

Así se analizó en la reunión que mantuvieron ayer el director general de Carreteras, José Antonio Fernández, y la subdirectora general de Conservación de Carreteras del Ministerio de Fomento, María del Carmen Sánchez, para analizar los parámetros que viene aplicando el Estado en las autovías construidas con la fórmula de colaboración público-privada.

Este encuentro con el Ministerio forma parte de los contactos que está manteniendo la Comunidad para analizar las ventajas y oportunidades que ofrecen los sistemas de colaboración público-privada para la construcción de carreteras.

Parámetros a considerar

Algunos de los parámetros que se tendrán en cuenta son la atención de accidentes e incidencias, la regularidad del firme, la reparación y reposición, la renovación de la señalización, el índice de accidentalidad, las actividades de limpieza periódicas, la regularidad del firme y la señalización, según citaron las mismas fuentes.

Para ello, se deberán fijar unos umbrales de calidad objetivos y fáciles de medir en los pliegos de licitación de las obras. Su cumplimiento condicionará la bonificación o, en su caso, penalización, de la retribución que recibe el concesionario.

Por ejemplo, se podrían fijar unas mediciones ordinarias anuales para analizar el estado de los firmes para facilitar su supervisión, o una valoración de la limpieza de la carretera que no precise tener que contar los objetos retirados de la vía, ni su tamaño.