La Región conjura los augurios de estancamiento y mantiene un crecimiento superior al previsto para el tercer trimestre, aunque no ha logrado evitar un frenazo en la creación de empresas, que la patronal atribuye a la incertidumbre generada por la interinidad del Gobierno y que ha causado la pérdida de 719 compañías entre enero y septiembre. La CROEM detecta una vitalidad de la economía murciana que desmiente los posibles efectos del «Brexit o la pérdida de fuelle de ciertos vientos de cola que anticipaban una hipotética desaceleración del crecimiento que, en la práctica no parece haberse producido».

En el último Informe de coyuntura, correspondiente al tercer trimestre de 2016, la patronal destaca que la Región lidera el crecimiento de la ocupación y que «la actividad productiva ha resistido extraordinariamente bien el envite de un convulso entorno nacional y mundial», aunque tiene presentes los perjuicios que pueden ocasionar el Brexit o las aspiraciones proteccionistas del presidente electo de EE UU, Donald Trump.

Las buenas expectativas se explican, «de una parte, por el buen pulso del consumo y la inversión privados y la mejora sustancial de las ventas exteriores, mientras el gasto público se mantiene plano». Las ventas del comercio minorista avalan la recuperación del consumo, «que aumenta un 5,7% respecto al mismo trimestre del año anterior, frente a una media española del 3,9%, con unas muy buenas expectativas respecto a consumo y empleo de cara a la campaña navideña».

Asimismo, la venta de vehículos crece un 13% en los nueve primeros meses del año, aunque en agosto y septiembre ha mostrado signos de desaceleración.

Por otra parte, la campaña turística ha dejado un aumento de casi el 12% en la llegada de viajeros y en las pernoctaciones, mientras que los ingresos del sector han crecido un 10%, «si bien los márgenes de rentabilidad siguen siendo reducidos al situarse la tarifa media diaria en 64 euros en septiembre, muy por debajo de media la española (84 euros)».

También ha mejorado el acceso al crédito de las empresas murcianas, aunque la patronal prevé que habrá más facilidades a partir de ahora gracias a los programas de financiación que ha puesto en marcha el Instituto de Fomento y el ICO.

La CROEM señala que «este favorable e inesperado comportamiento económico se está dejando notar en la confianza empresarial, que mejora las tasas del trimestre precedente (+3,8%, frente a una mejoría del 0,2% de media nacional).

Por tanto, existe una percepción algo más favorable de la situación económica que, en cambio, no ha servido para ampliar el tejido empresarial». De acuerdo con este balance, «se advierte una desfavorable dinámica empresarial», dado que en septiembre había en la Región 42.559 empresas inscritas en la Seguridad Social, lo que implica la desaparición de 719 en los nueve primeros meses del año y de 16 si se compara con septiembre de 2015». La patronal atribuye el frenazo en la creación de empresas a la incertidumbre generada durante el largo periodo que el Gobierno central ha permanecido en funciones, lo que ha llevado a las compañías con planes de inversión a dejar en suspenso sus proyectos, al no tener claro con qué ayudas podrían contar.

De hecho, el presidente de la CROEM, José María Albarracín, calculaba hace unos meses que en la Región había proyectos de inversión que sumaban unos mil millones de euros paralizados por culpa de la interinidad del anterior Ejecutivo.

También el empleo ofrece claroscuros en el tercer trimestre, dado que en septiembre «se contabilizaban 3.062 parados más en la Región (para dejar la cifra total en 119.912) y 17.038 afiliados a la Seguridad Social menos que en junio», según el Informe de Coyuntura. No obstante, el balance anual arroja 10.442 parados menos y 19.000 afiliados más que en septiembre del año anterior.

A pesar de esta atonía, las exportaciones han seguido creciendo alentadas «por la inflación, que se ha situado en valores positivos por primera vez en 29 meses». Si se eliminan las ventas al exterior de productos energéticos, que están sujetas a una mayor volatilidad, las exportaciones de las empresas murcianas han crecido un 4,6% hasta septiembre.

No obstante, se han resentido las ventas a Reino Unido, que ascendían a 695 millones en los nueve primeros meses, lo que supone 38,5 millones menos. Por el contrario, aumentan un 67% las exportaciones a los Países Bajos, que alcanzan los 578 millones.

La agricultura, que ha visto condicionada su producción por la falta de agua, ha salvado la campaña «vía precios», mientras que la construcción mantiene una lenta recuperación, con «tímidos signos de mejoría» de la edificación. Tampoco la licitación pública ayuda a mantener la actividad de las empresas, dado que en el tercer trimestre del año se ha reducido a 37,2 millones, que supone un descenso del 72% en relación al periodo comprendido entre abril y junio.

El Informe de coyuntura constata que la Región terminará el año con un crecimiento superior al 3%, aunque las expectativas para 2017 no son tan optimistas. El crecimiento del PIB del próximo año podría situarse entre el 1,9% que vaticina Funcas y el 2,4% de contempla el servicio de estudios del BBVA.