Los abogados de Juan Cuenca y de Valentin Ion, que reconocieron en el juicio haber participado en la muerte violenta de la jugadora holandesa de voleibol Ingrid Visser y de su pareja, Lodewijk Severein, los calificaron ayer de delitos de asesinato y pidieron para cada uno de ellos dos condenas de 4 años de prisión.

Aunque los hechos tienen que ser calificados de esa forma porque las víctimas no tuvieron la más mínima posibilidad de defensa cuando recibieron el mortal ataque, para estos letrados se debe aplicar a sus defendidos las atenuantes de confesión de los hechos y dilaciones indebidas, al considerar que el caso estuvo paralizado en la fase de instrucción 21 meses.

El defensor del tercer acusado, Constantin Stan, pidió solo tres meses de cárcel por encubrimiento, con aplicación de esas mismas atenuantes, ya que, ha dicho, no participó en los asesinatos, sino solo en la recogida de los restos. Respecto al cuarto acusado, Serafín de Alba, propietario de los terrenos donde fueron sepultados los cadáveres, para quien las acusaciones reclaman tres años por encubrimiento, su abogado reclamó su absolución.

Por su parte, la fisca reiteró su solicitud de dos penas de 25 años de prisión cada una para Cuenca, Ion y Stan. Para la acusación pública, las pruebas que pesan sobre los acusados son «abrumadoras» y acreditan los hechos.