La situación de los regadíos del Campo de Cartagena puede haber dado un vuelco. Las organizaciones agrarias aseguran haber arrancado a la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) el compromiso de que serán regularizados los pozos en los que se retiren los vertidos de salmuera para almacenarlos en balsas, evitando que acaben en el Mar Menor. El presidente de Coag en el Campo de Cartagena, Vicente Carrión, calcula que podrían legalizarse unos 500 sondeos al amparo del decreto de sequía aprobado por el Consejo de Ministros, que estará vigente hasta finales de septiembre de 2017, mientras que el organismo de cuenca presidido por Miguel Ángel Ródenas ha precisado que hasta ahora ha recibido 64 solicitudes y que las demás serán estudiadas caso a caso, sin precisar una cifra.

El acuerdo está siendo comunicado esta noche a los agricultores reunidos en una asamblea en Torre Pacheco con el fin de desconvocar las protestas que las organizaciones agrarias estaban preparando por su cuenta, al margen de la Mesa del Agua y del Sindicato de Regantes.

La CHS ha hecho público un comunicado esta tarde en el que informa de la reunión mantenida con los representantes de Fecoam, Coag y UPA en la que se ha tratado la regulación de los pozos de seguía. «El organismo de cuenca ha recibido hasta ahora 64 peticiones, aunque se desconoce cuántas serán finalmente presentadas. Todas las solicitudes se estudiarán y tramitarán de acuerdo con la legislación de aguas y medioambiental. La Administración central y la autonómica van a trabajar de forma coordinada y conjuntamente, analizando caso a caso», precisa la nota. En principio, se estima que los 64 pozos en trámite permitirían la extracción de unos 5 hectómetros cúbicos al año. El Campo de Cartagena recibe en este momento 3,3 hectómetros cúbicos mensuales del Trasvase, pero sus necesidades se elevan a unos 150 hectómetros anuales, según las estimación de Vicente Carrión.

Mientras tanto, hoy ha continuado la polémica por los nuevos vertidos de la rambla del Albujón al Mar Menor denunciados por Anse a la Fiscalía. Fuentes de la CHS indicaron que este organismo está investigando si los vertidos detectados por la organización ecologista proceden de las desalobradoras clausuradas el pasado verano con el sellado de tuberías. Por su parte, la consejera de Agua, Agricultura y Medio Ambiente, Adela Martínez Cachá, ha negado que se trate de vertidos de salmuera y ha asegurado que el aumento del caudal de la rambla procede del drenaje de los riegos y las escorrentías provocadas por la lluvia. «Los pozos y las desalobradoras están cerrados», ha dicho.