La Guardia Civil ha detenido en la madrugada del pasado sábado al conductor de una furgoneta, de 32 años y nacionalidad española, tras saltarse un control en Cartagena y circular, de modo temerario, durante 25 kilómetros, bajo los efectos de las drogas.

Igualmente, ha arrestado a una mujer, de 31 años y de nacionalidad española, por circular en sentido contrario con su turismo durante más de 17 kilómetros por la A-7 y ocasionar un accidente, triplicando la tasa máxima de alcohol.

Sobre la 1.30 horas del pasado sábado, guardias civiles del Destacamento de Tráfico de Cartagena, mientras se encontraban realizando un control preventivo de alcoholemia y drogas en Cartagena, N-332 (Cartagena-Valencia), entre otros vehículos, pararon a una furgoneta cuyo conductor, tras haberse detenido en el arcén de la carretera y ser informado de que iba a ser sometido a las preceptivas pruebas, en lugar de atender las órdenes de los agentes aceleró bruscamente dándose a la fuga con riesgo de atropello para los agentes, que tuvieron que desplazarse al arcén para evitar ser arrollados.

Una patrulla de motoristas de la Agrupación de Tráfico, con la señalización óptica y acústica especial activada, inició el seguimiento del vehículo evasor que continuó una precipitada fuga durante más de 25 kilómetros hasta volver a la N-332, travesía de La Unión, donde su conductor paró bruscamente y abandonando el vehículo en medio de la calzada con el motor en marcha, salió corriendo y se internó por las calles de la población, donde se le perdió la pista.

Durante la arriesgada huida, el conductor de la furgoneta hizo reiterado caso omiso a las señales reglamentarias de parada que le hacía la patrulla de motoristas de la Guardia Civil con los medios oficiales, realizando sucesivas maniobras peligrosas, conduciendo en zig-zag con cambios imprevistos de carril.

Además, se detuvo y aceleró bruscamente cuando la patrulla se aproximaba, mirando continuamente hacia atrás por la ventanilla del vehículo, increpando a la fuerza policial, e internándose en sentido contrario en varias glorietas, todo ello con el evidente riesgo de accidente para varios vehículos con los que se encontró a su paso.

Así, se estableció el dispositivo oportuno encaminado a la localización del conductor de la furgoneta que, tras laboriosas gestiones, dio su fruto poco después, cuando se averiguó que el conductor fugado se había ocultado en un inmueble de la Unión para eludir su responsabilidad, donde fue hallado e identificado, tratándose de un joven, quien arrojó un resultado positivo en el consumo de cocaína y cannabis.

Por estos hechos se procedió a su detención por sendos delitos contra la seguridad vial, uno por conducción temeraria y otro por hacerlo bajo la influencia de drogas, siendo puesto a disposición del Juzgado de Instrucción número 3 de Cartagena (Murcia). Asimismo, el vehículo fue retirado por un familiar habilitado para conducirlo, quedando a disposición de la misma autoridad judicial.

Poco después de la detención de La Unión, la Central Operativa de Servicio de Tráfico del Sector/Subsector de Murcia fue alertada, a través del teléfono de Emergencias '1-1-2', que un turismo había sido visto por varios conductores circulando en sentido contrario al establecido por la autovía A-7 (Algeciras-Barcelona), haciéndolo sentido Algeciras por la calzada reservada al sentido Barcelona.

Se estableció el dispositivo oportuno para hacer frente a la situación y evitar un probable accidente de fatales consecuencias. Se movilizaron una patrulla de motoristas y un equipo de atestados del Destacamento de Tráfico de Lorca que, haciendo uso de los medios oficiales, consiguieron interceptar el vehículo en la autovía a la altura de Alhama de Murcia, después de haberse cruzado durante el trayecto con varios vehículos que circulaban correctamente y que se vieron obligados a realizar bruscas maniobras evasivas para evitar colisionar con aquel.

Durante los más de 17 kilómetros de conducción en sentido contrario llegó incluso a colisionar con un vehículo articulado de grandes dimensiones, pese a lo cual y a haber sufrido considerables desperfectos continuó su anómala marcha hasta que pudo ser interceptado por los agentes.

La Guardia Civil restableció la seguridad de la circulación, alterada por este suceso, desplazando al vehículo infractor hasta la carretera N-340 (Cádiz-Barcelona). Identificada su conductora, que aparentaba claros signos de hallarse bajo la influencia de bebidas alcohólicas, fue sometida a las preceptivas pruebas que arrojó los resultados de 0,78 y 0,73 miligramos de alcohol por litro de aire, respectivamente en ambos test obligatorios, superando el triple de la tasa máxima permitida que es de 0,25 mg/litro.

Por estos hechos se procedió a su detención por sendos delitos contra la seguridad vial, uno por conducción temeraria y otro por hacerlo bajo la influencia de alcohol, siendo puesta a disposición del Juzgado de Instrucción número 3 de Totana para la celebración de un juicio rápido. Asimismo, el turismo, que había sufrido desperfectos de consideración, fue retirado por un servicio de asistencia en carretera, quedando a disposición de la autoridad judicial.

La conductora detenida, debido a la elevada tasa de alcoholemia que presentaba, se encontraba totalmente desorientada e incapacitada para la conducción y circulaba desde Alcantarilla con la intención de desplazarse, en estas pésimas e inseguras condiciones, hasta la pedanía murciana de Barqueros, habiéndose cruzado con varios vehículos que alertaron al '1-1-2' y que le hicieron señales para avisarle de esta anormalidad que, no obstante, fueron ignoradas por aquella, que continuó circulando hasta que pudo ser interceptada por la Guardia Civil.

En lo que llevamos de año, en las carreteras de la Región de Murcia se han registrado otros seis episodios de conducción temeraria en sentido contrario.