La Región de Murcia y las Islas Baleares se convirtieron ayer en alliados potenciales a la hora de exigir al Gobierno de España la elaboración y aprobación de un nuevo modelo de financiación autonómica y para reclamar la llegada del Corredor Ferroviario del Mediterráneo.

El presidente de la Comunidad, Pedro Antonio Sánchez, viajó ayer a Palma de Mallorca, donde se reunión con su homóloga balear, la socialista Francina Armengol, que gobierna con el apoyo de Podemos y de una plataforma de tinte nacionalista llamada MES. Ambos firmaron una declaración institucional en la que reclama al Estado un nuevo modelo de financiación «que incluya la ruptura con el actual 'status quo' y que garantice la recepción de recursos suficientes y necesarios para el ejercicio de las competencias transferidas a las comunidades autónomas», pues ambos considerar que el actual sistema, que data de 2009, les perjudica frente a otras regiones.

En el documento firmado, los dos presidentes autonómicos especifican cómo debería ser el nuevo modelo de financiación, señalando que tiene que ser «transparente, más sencillo, que facilite la rendición de cuentas y la asunción de responsabilidades por parte de los Gobiernos subcentrales». Asimismo, debe establecer «un equilibrio vertical entre diferentes niveles de la administración» y garantizar «a igual esfuerzo fiscal, niveles similares de financiación por habitante ajustado para prestar los mismos servicios».

Sánchez y Armengol instan también al Estado a contribuir «al reequilibrio de la situación de infrafinanciación histórica» sufrida por ambas comunidades «a través de mecanismos de absorción de la deuda pública».

En otro punto de la declaración institucional, los dos presidentes se alían también para exigir al Gobierno central «que acelere el proceso para que el Corredor Ferroviario del Mediterráneo pueda ser una realidad lo antes posible». Baleares debe contar, según la declaración, «con una clara mejora de la conectividad interislas, y de estas con la península».

El presidente de la Comunidad ha viajado a Palma de Mallorca acompañado por el consejero de Turismo, Juan Hernández, y la secretaria de Estado de Turismo y diputada por Murcia, Isabel Borrego, natural de las islas. El objetivo del viaje institucional, además de establecer una alianza con el Ejecutivo balear por la financiación autonómica, es captar inversiones para la Región de Murcia e iniciar contactos con las principales compañías hoteleras españolas ubicadas en Baleares para que desembarquen en la Región de Murcia. También recabar ideas para intentar exportar el modelo turístico balear a la Región de Murcia.

De hecho, el último punto de la declaración institucional señala que los dos Gobiernos «acuerdan iniciar un proceso de colaboración en materia de cualificación turística que permita intercambiar buenas prácticas y mejorar la capacitación profesional del sector del turismo».

El jefe del Ejecutivo regional indicó asimismo, en rueda de prensa tras la reunión, que comunidades autónomas como Murcia y Baleares «tenemos que soportar más con recursos propios porque recibimos menos dinero para los servicios públicos elementales e irrenunciables».